Un invicto para Jon Jones
Jones Jones defiende el Campeonato de la UFC del peso semipesado contra Dominick Reyes. Es su tercera defensa desde que recuperó el título en 2018.
El octágono de la UFC ya espera a Jon Jones. El campeón del peso semipesado tuvo un regreso muy cargado de peleas tras su sanción por dopaje. Volvió, ganando el título ante Gustafsson, el 29 de diciembre de 2018 y en poco más de seis meses realizó dos defensas ante Anthony Smith y Thiago Santos. Era muy superior y le llegó la desmotivación. Amenazó con hacer un parón para que otros nombres subiesen. También valoró cambiar al peso pesado... pero finalmente ha encontrado un reto que le motiva: Dominick Reyes.
El estadounidense, de 30 años, es el luchador que viene en claro ascenso. Está invicto en 12 peleas y solo en tres agotó las cartulinas. Sin duda es un combate que motiva a Jones, y es que 'Bones' es el campeón con más defensas satisfactorias en el semipesado (10), pero solo se ha enfrentado en luchas titulares una vez a un invicto, Daniel Cormier. Un plus. Sin duda, el pleito es interesante, pero el futuro de Jones es lo que ocupa todo. Ha limpiado la división (aunque en su última defensa aburrió y acabó abucheado) y es muy favorito, por lo que pensar en el próximo paso es inevitable. Jones, se lo toma con calma. ¿Miocic? ¿Adesanya? El estadounidense sigue calentando un posible choque contra el africano.
"Esto no es K1. Esta no es la liga en la que solía pelear. Lo he visto venir aquí, literalmente, con las piernas rígidas. Su arrogancia es emocionante para los fans, pero conozco a mil personas como él. Crecí con personas como él. Está asustado, eso es todo. Cuando me haces saber que no estás preparado para pelear conmigo hoy y quieres un año más para prepararte, me haces saber tu estado mental. Es todo lo que necesito saber", apuntó en la previa el campeón sobre Adesanya.
Fuera de esas posibles peleas en el futuro, Jones se centra en Reyes, quien se enfrenta a la pregunta del millón: ¿cómo ganar a Bones? Esa cuestión la han tenido 26 luchadores (su única derrota llegó por descalificación) y nadie la ha sabido descifrar todavía. Reyes tiene buena pegada y también se defiende en el suelo, pero parece lejos, al menos sobre el papel, del campeón. Jones sabe jugar en su distancia, castigas sin arriesgar y por su tamaño su dominio es total. Los retos en su división casi los ha agotado. El sábado, en el UFC 237 de Houston, le espera un invicto. ¿El último en el semipesado? Solo el tiempo lo descifrará.