Un año de Abanca en el Depor: de la tempestad a la calma
El 8 de febrero de 2021 Abanca tomaba las riendas del Deportivo. Destituía a Vidal, nombraba a Couceiro presidente e iniciaba la revolución del club.
Hoy martes hace un año que comenzó la era Abanca en el Deportivo. El 8 de febrero de 2021 la entidad bancaria decidía el relevo de Fernando Vidal y todo su consejo de administración al frente del club. Acto seguido anunciaba el nombramiento de Antonio Couceiro como nuevo presidente junto a cuatro consejeros (David Villasuso, Eduardo Blanco, Emma Lustres y Carlos Cantó). La decisión fue toda una conmoción que arrancó con la primera gran polémica al confirmarse que el nuevo consejo de administración iba a ser profesional, o sea, que iba a cobrar.
Lo cierto es que durante el mes de enero ya se fueron sucediendo varios acontecimientos de la mano de Abanca tras la destitución de Fernando Vázquez el 11 de ese mes y la llegada de Rubén de la Barrera. Con el equipo sin levantar cabeza, los focos comenzaban ya a apuntar al director deportivo Richard Barral. Se dio orden de que Rolan, una anomalía en Segunda B por su enorme salario, no continuase, y se cortó el grifo a los nuevos fichajes invernales. Juan Carlos Escotet, presidente de Abanca, anunció “cambios" el 3 de febrero y cinco días después se producía el terremoto. Incluso Abanca, días después, hizo un intento con Mauro Silva o Scaloni para incorporarlos al club, pero sin éxito.
La temporada continuó con mucha pena y poca gloria. El Depor no pudo acabar entre los tres primeros para pelear por el ascenso e incluso estuvo al borde de luchar por no bajar. En la segunda liguilla logró su clasificación para la nueva Primera RFEF tras acabar segundo por detrás del Racing de Ferrol. Con Richard Barral apartado de facto (se produciría su salida el 22 de mayo) se nombra a un joven y novel Carlos Rosende secretario técnico como aperitivo a los cambios que venían. Con la oferta encima de la mesa para renovar, Rubén de la Barrera duda, dilata su decisión y Couceiro decide prescindir de él de forma tajante. Rosende, ya al mando, elige a Borja Jiménez y comienza la revolución de la plantilla.
El nuevo secretario técnico y su nuevo equipo inician una profunda revolución de la plantilla que terminaría el 1 de septiembre con 15 salidas y 18 fichajes. Abanca manda ajustarse el cinturón con la puesta en marcha de un ERE centrado en los salarios más altos de los jugadores de la anterior etapa. A la vez, se producen salidas de trabajadores del club históricos como Barritos, Franganillo, Duscher o la marcha de Valerón. Mientras, Rosende cambia el perfil de la nueva plantilla apostando por jugadores contrastados de la categoría ajustando salarios y con contratos cortos para no hipotecar al club.
En medio de tanta convulsión, el Juvenil da una gran alegría al club y al proclamarse campeón de España derrotando a Real Madrid y Barcelona en semifinales y final. Un triunfo con significado para el nuevo proyecto, ya que desde el día de su llegada Couceiro señaló que buena parte del futuro pasaba por la cantera. Por el contrario, el Deportivo Abanca confirma su descenso de la Liga Iberdrola y, como ocurrió con el equipo masculino, se lleva a cabo una profundísima remodelación que llega hasta Manu Sánchez, su entrenador.
Líder destacado
El Depor arranca la temporada con un gran apoyo social, hoy en día se rozan los 20.000 abonados, y con una goleada ante el Celta B 5-0 que dispara el optimismo. Un inicio ilusionante que se ha ido confirmando jornada a jornada hasta consolidar al conjunto coruñés como líder en solitario con seis puntos de ventaja y batiendo numerosos récords a pesar de la última derrota ante el Real Unión. De igual modo, el tsunami inicial con la toma del mando de Abanca se ha ido convirtiendo en una tranquilidad inusitada en la última década. El ruido ha desaparecido al tiempo que la entidad bancaria, que tiene el claro objetivo de regresar al fútbol profesional, realizaba una nueva inyección de 12 millones de euros para equilibrar las pérdidas de la era Vidal. Apuesta económica firme que la semana pasada vivió un nuevo capítulo de lo definido que está el rumbo al asegurar Escotet que descartaba utilizar el Fondo CVC en caso de ascenso.