Los finalistas se decidieron desde los once metros


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Los finalistas se decidieron desde los once metros

Euro 96 - Semifinales: 26-06-1996

Los finalistas se decidieron desde los once metros

La Eurocopa quedó marcada definitivamente por la subyugación del fútbol a la dictadura de los penaltis y las semifinales fueron la muestra más evidente. El lanzamiento indiscriminado desde los once metros hizo de los porteros los verdaderos héroes. Köpke volvió a ser decisivo deteniendo el lanzamiento del inglés Southgate y dejó a los anfitriones sin fiesta nacional. Por su parte, la pierna de Kouba certificó la mayor gesta del fútbol checo. Alemanes y checos, como veinte años antes, eran los finalistas. (Foto de apertura: los checos celebraron la clasificación por todo lo alto).

Primera semifinal: Inglaterra - Alemania

Inglaterra 1-1 Alemania

Londres. 26-06-1996
Seaman; Pearce, Adams, Southgate, Platt; Ince, Anderton, Gascoigne; Shearer, Sheringham, McManaman.
Köpke; Sammer, Helmer (Bode 110’), Babbel, Reuter; Freund (Strunz 119’), Eilts, Ziege, Möller; Scholl (Hässler 77’), Kuntz.
Árbitro: Sándor Puhl (Hungría)
0-1 Shearer 3’. 1-1 Kuntz 16’.
Tanda de penaltis
Inglaterra Alemania
Shearer Gol Hässler Gol
Platt Gol Strunz Gol
Pearce Gol Reuter Gol
Gascoigne Gol Ziege Gol
Sheringham Gol Kuntz Gol
Southgate Parado Möller Gol

Alemania finalista

Sobró el tiempo reglamentario en el duelo entre alemanes e ingleses. Los noventa minutos no tuvieron más historia que el gol de Shearer y la igualada de Kuntz. Fue en la prórroga cuando ambos se lanzaron a por el gol de oro: el poste escupió un remate de Anderton, Seaman despejó una ocasión de Möller, Gascoigne no llegó a un pase de McManaman... Al final no hubo goles y los penaltis volvieron a decidir. Tras marcar todos en la primera tanda, Köpke paró el tiro de Southgate y Möller marcó el decisivo.

Kuntz, en el momento de batir a Seaman y lograr el empate.

Köpke detiene el lanzamiento de Southgate.


Segunda semifinal: Francia - República checa

Francia 0-0 República Checa

Manchester. 26-06-1996
Lama; Lizarazu, Blanc, Roche, Thuram (Angloma 82’); Zidane, Guerin, Desailly, Lamouchi (Pedros 62’); Loko, Djorkaeff.
Kouba; Rada, Hornak, Kadlec, Novotny; Poborski, Nemec (Kubik 8’), Némecék, Nedved; Drulák (Kotulek 70’), Šmicer (Berger 46’).
Árbitro: Leslie William Mottram (Escocia)
Tanda de penaltis
Francia R. Checa
Zidane Gol Kubik Gol
Djorkaeff Gol Nedved Gol
Lizarazu Gol Berger Gol
Guerin Gol Poborski Gol
Blanc Gol Rada Gol
Pedros Parado Kadlec Gol

Reynald Pedros fue el encargado de lanzar el undécimo penalti; Kouba lo detuvo.

Kadlec fue el verdugo

Los galos se despidieron de la Euro tras probar la medicina que ellos mismos dieron a Holanda. Domaron el partido y gozaron de dos ocasiones claras para rematar a los checos, una de Djorkaeff, que remató al larguero, y otra de Blanc, a dos minutos del final de la prórroga. Sin embargo, no era el día del ataque de Francia y se llegó a los penaltis. La emoción se mantuvo hasta el duodécimo lanzamiento. Kadlec marcó y guillotinó a los bleus porque el undécimo, lanzado por Pedros, fue desviado por la pierna de Kouba.

Los checos, mermados

La República Checa supo aguantar las embestidas francesas a pesar de llegar mermada al duelo de semifinales. Bejbl, Suchoparek, Kuka y Latal, cuatro de sus mejores jugadores, estaban sancionados. Y es que lo de los checos con las tarjetas fue de órdago. En sus cuatro partidos disputados vio 15 tarjetas (14 amarillas y una roja), un récord en esta Eurocopa.

El checo Poborski se las vio y se las deseó para pasar a la zaga francesa. En la imagen, se intenta zafar de Lizarazu.

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