Mou empieza a ganar batallas con Eriksen

"Marcó la diferencia. Estábamos a punto de perder cuando él entró y José Mourinho tomó la decisión de sacar a un jugador más ofensivo al campo. Podría haber sido por cualquiera de nosotros, pero afortunadamente la sustitución funcionó". Son palabras del centrocampista del Tottenham, Delle Alli. El estreno en Champions de José Mourinho al frente del club londinense no empezó para nada bien, ya que encajaron dos goles al poco de comenzar el encuentro. Sin embargo, el portugués supo reaccionar a tiempo quitando en el minuto 28 a Eric Dier para dar entrada a Christian Eriksen, que revolucionó el partido y fue uno de los hombres clave para dar la vuelta al marcador, que terminó 4-2. El danés dio una asistencia a Harry Kane y supo aprovechar sus minutos.

Eriksen ha jugado ocho veces como suplente en lo que va de temporada, además de no saltar al campo contra el Sheffield United o de su no convocatoria ante el Watford. Hasta ahora había aceptado su suplencia sin problemas ya que su rendimiento había bajado últimamente ("Que juegue menos no tiene nada que ver con mi contrato"), tratando de aprovechar las oportunidades que se le presentaban, pero ayer volvió a coger el mando del equipo cuando más se le necesitaba y volvimos a ver al Eriksen de siempre. El entrenador ya gana batallas con él y seguramente empiece a utilizarle de inicio más a menudo.

Con Mourinho, al Tottenham se le presenta una nueva posibilidad de renovar al futbolista, que hasta ahora se había negado a extender su contrato, quizá por su supuesta mala relación con Pochettino, o quizá porque cree que triunfará fuera de Londres . La llegada del portugués sería la última baza para conseguir protegerle de los equipos que saben que se lo llevarán gratis en verano, especialmente del Real Madrid, que parece el mejor colocado para llevárselo, ya que Zidane le sigue desde hace tiempo. En cualquier caso, el técnico luso no quiere aventurarse a decir que intentará que renueve por si falla en su intento: "Tengo que entender qué hay en la cabeza y en el corazón del futbolista, solo entonces tomaremos la mejor decisión con el club. No es solo un tema de continuidad. El partido de hoy era muy importante, pero el futuro del club también lo es", dijo tras darle once minutos ante el West Ham.

Retenerle no será tarea fácil, ya que además de subirle el sueldo deberán convencerle de que en el nuevo proyecto del Tottenham el objetivo es ganar títulos y subir un escalón. Además, el club inglés juega contrarreloj, ya que de no convencerle antes del mes de enero (fecha en la que se abre el mercado de fichajes), deberían verse obligados a escuchar ofertas para intentar sacar algo de dinero por él. Una vez llegado ese momento, será muy complicado hacerle cambiar de opinión para que no se vaya gratis.

Mourinho cuenta con él y tal y como dijo no planea hacer fichajes, por lo que confía en los jugadores que tiene. Queda por ver si el danés confía en el entrenador que tiene, y la decisión que tome en los próximos meses nos sacará de dudas.