Real Madrid 1 - Al Ittihad 1 | Análisis del crack portugués

Cristiano: un tirazo y un penalti no pitado

Seguro que esperaba otro debut, otro juego, otro resultado, otra entrada...

Tomás Guasch

Le hicieron un penalti que no pitaron y el portero metió una magnífica mano abajo para desviar su mejor disparo del partido. Fue en la primera parte, cuando encontró (alguna vez) a Benzema, el socio que le llegó desde Francia. El tirazo llegó después de una pared entre los dos, uno de los lances de más calidad de un envite que acabó teniendo un único protagonista: el Al Ittihad de Gabi Calderón, que se llevó un empate que ni en sueños había imaginado. Y en el debut de Cristiano. Se lo contarán a sus nietos Quizá también Cristiano, que seguro esperaba otro partido, otro juego, otro resultado, otra entrada. El día de su presentación, media hora mal contada, se llenó el Bernab ayer sobró la mitad del estadio. En Sevilla está pasando lo mismo. Esta Peace Cup no ha cuajado de momento en España.

Cristiano dejó fogonazos, las expectativas se mantienen. Enseñó su movilidad, sus taconazos y una idea más allá del resultado y del partido: el Madrid toca demasiado teniéndole a él, y a Benzema y a otros en el campo. Que recuerde, le dieron un balón al espacio el tiempo que jugó. Sí, estamos como en Dublín: el equipo no está fresco, sería imposible pretenderlo, pero conduce demasiado para mi gusto. Y para el de Cristiano: segurísimo. El Madrid se pierde en un tocar y tocar que para nada le conviene. En eso influyen las piernas, pero más la cabeza. Fiémonos de Pirri: "El Madrid debe ser vertical y rápido". Lo demás no le interesa y anoche no supo serlo. ¡Que sí, que sí, que esto está empezando! Pero conviene recordarlo.

El 'Pirata'.

Ronaldo cató de qué va la copla en su nuevo club. El gol lo acaba marcando Raúl y el pueblo aclamó la presencia de Granero, que casi rompe el larguero con su chutazo. El Pirata sí trató de jugar en largo y presentó sus credenciales en una noche de horario extraño que acabó como acostumbran a acabar los partidos que se tuercen: los mejores fueron los que no estaban en el campo. Kaká, por ejemplo. Y la defensa entera: Casillas, Sergio, Pepe, Raúl Albiol y, ahí te quiero ver Pellegrini, un lateral zurdo que me da que no va a ser Drenthe. Y como Heinze no cuenta, será Marcelo. Y otros por los que suspira Florentino y la afición: Xabi Alonso y Ribéry. No es muy justo, pero es lo normal en estos casos. Otro gallo cantaría si Cristiano hubiese metido un par de goles. O uno ...