La OMS señala sus tres preocupaciones tras hallar dos nuevas subvariantes
La Organización Mundial de la Salud monitoriza los linajes BA.4 y BA.5 de la variante Ómicron. Se han detectado decenas de casos en varios países.
La pandemia del coronavirus SARS-CoV-2 entra ya en su tercer año, con una incidencia estabilizada y el fin de muchas de las restricciones en gran parte del mundo. No obstante, el virus sigue mutando, como así indica el reciente hallazgo de la OMS de una nueva variante, conocida como XE. La transmisión hace que sea posible que surjan nuevas versiones del patógeno, y ahora la Organización Mundial de la Salud estudia dos subvariantes de Ómicron.
Así lo ha indicado el estamento en las últimas horas, tras detectar de momento pocos casos de estas subvariantes de Ómicron, hasta ahora la más contagiosa de toda la pandemia. El objetivo es determinar si BA.4 y BA.5, que así se llaman, pueden ser más virulentas o contagiosas que la original.
Junto con estas subvariantes, la OMS estudia otras 'hermanas' de la versión original de Ómicron, como son BA.1.1 y BA.3. "Sus mutaciones adicionales hacen que deban estudiarse más a fondo para comprender su impacto en el potencial de escape inmunológico", señala el organismo. Que tenga una mayor capacidad de contagio o que escape a la inmunidad de las vacunas es algo que todavía no pueden determinar.
Qué se sabe de BA.4 y BA.5
Meses después de que fuera detectada, el sublinaje BA.2 representa ahora cerca del 94% de los casos analizados, en parte debido a su mayor capacidad de transmisión. No obstante, los estudios sugieren que no implica mayor riesgo de padecer una enfermedad grave. Respecto a BA.4 y BA.5, la OMS informa de que apenas hay unas docenas de casos, según los datos disponibles en la base de datos GISAID.
Por su parte, la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido (UKHSA, por sus siglas en inglés) asegura que la subvariante BA.4 se había hallado en países como Sudáfrica, Dinamarca, Botswana, Escocia e Inglaterra. En cuanto a BA.5, todos los casos se encontraban en Sudáfrica, hasta que la semana pasada el Ministerio de Salud de Botswana informó de los primeros casos por esta subvariante, todos ellos en personas de entre 30 y 50 años, vacunadas con la pauta completa y con una sintomatología leve.
La UKSHA asegura que en ambas subvariantes había "potenciales mutaciones biológicamente significativas". Hasta la fecha Dinamarca ha notificado tres casos de BA.4, mientras que Sudáfrica ha detectado 45 de BA.4 y 27 de BA.5.
Las tres preocupaciones de la OMS
Este pasado lunes se volvió a reunir el Comité de Emergencias de la OMS para estudiar la evolución de la pandemia tras más de dos años. Durante la misma, el director general Tedros Adhanom Ghebreyesus aseguró que es "gratificante ver una tendencia a la baja en las muertes registradas", siendo la más baja en los últimos dos años.
No obstante, desde la OMS avisan de que la transmisión sigue siendo muy alta, elevando el riesgo de aparición de nuevas variantes, como las notificadas en las últimas horas. Tedros asegura que, pese a la inmunidad que otorgan las vacunas y mejora epidemiológica, "la pandemia está lejos de terminar". Según el director general de la OMS, hay tres factores que preocupan: el cansancio de la gente, la duración de dicha inmunidad, que no está del todo clara, y el potencial surgimiento de nuevas versiones del virus.
En cualquier caso, recuerda que se disponen de las herramientas necesarias para cortar la transmisión. "Tenemos los sistemas para comprender mejor el virus a medida que va cambiando, y tenemos las vacunas, las pruebas, los tratamientos y las medidas sociales y de salud pública para poner fin a la fase aguda de la pandemia de COVID-19".