Reino Unido se asoma a la normalidad. Por primera vez desde que comenzó la pandemia, el país registró el martes cero muertes por coronavirus. Los datos ya venían siendo muy buenos, puesto que durante la última semana las cifras de decesos se habían mantenido en un solo dígito, aunque la última jornada se registraron 12 decesos.

Respecto al número de contagios, fueron notificados 4.261 positivos. Se trata del octavo día seguido que se superan las 3.000 infecciones, mientras los expertos alertan sobre una posible tercera ola. La variante B1.617.2, identificada por primera vez en India, y que ahora se llama Delta según la OMS, es ahora la cepa dominante en el territorio y representa hasta tres cuartas partes de los casos nuevos, tal y como detalló Matt Hancock, Secretario de Salud.

La vacunación, vital

El dirigente británico recalcó la importancia de la inmunización: "Las vacunas están funcionando claramente, protegiéndote a ti, a quienes te rodean y a tus seres queridos. Pero a pesar de estas indudablemente buenas noticias, sabemos que aún no hemos vencido este virus y, dado que los casos continúan aumentando, hay que seguir lavándose las manos, la cara o aireando los espacios".

En estos momentos, Reino Unido supera ya los 65,7 millones de dosis administradas: más de 39,5 millones de personas han recibido al menos un pinchazo (alrededor del 60% de la población), mientras que 26,1 millones (un 39,1%) tienen a la pauta completa.

Discrepancia de cifras

Desde que comenzó la crisis sanitaria, Reino Unido ha notificado 128.057 muertes por coronavirus. Aunque esta cifra choca con la desvelada por la Oficina de Estadísticas Nacionales de la nación, que eleva la cifra hasta los 153.000 decesos en los que se mencionaba la COVID-19 como causa de defunción.