Puede parecer una cuestión menor, pero al fin y al cabo es una de las imágenes más recurrentes que estamos observando en las últimas semanas, la de personas que acuden al lugar indicado para ponerse la vacuna. Y no es lo mismo ir con una vestimenta que con otra.

Uno de los principales motivos es que se trata de un lugar sanitario o convertido para la ocasión, en el que compartes espacio con muchas otras personas y se recomienda que tu cuerpo quede expuesto el menor tiempo posible.

También es un factor importante el hecho de facilitar a los médicos o al personal sanitario responsable de vacunarte la acción de ponerte la inyección. En definitiva, hay aspectos sanitarios y técnicos a tener en cuenta a la hora de elegir una u otra vestimenta.

Los condicionantes que intervienen en el proceso de vacunación

Por ejemplo, cuando formas parte de una vacunación masiva, para la cual muchos países han puesto a disposición de los sanitarios grandes centros y espacios como estadios, catedrales o polideportivos, debes ser consciente de que vas a tener que aguantar largas colas, y encima se exige rapidez.

Es la idea de esta manera de vacunar, agilizar el proceso y no perder mucho tiempo con cada inyección. Por eso, cuanta menos ropa encima mejor, ya sean abrigo, jersey o sudadera, porque facilitas así al personal sanitario su labor y le haces perder menos tiempo si tienes que quitarte capas.

Otro aspecto a considerar es el de la parte del cuerpo que hay que dejar liberada. Ahora en invierno es normal llevar alguna prenda de ropa de más puesta o manga larga. Y para la vacunación, se necesita completamente descubierto el músculo deltoides, entre el hombro y la parte superior del brazo.

Finalmente, no es aconsejable quitarse mucha ropa. Aparte de que no es necesario, al haber mucho tránsito de personas no está bien visto desde el punto de vista médico y sanitario el desnudarse por completo, por ejemplo, de la parte de arriba.

La recomendación de los médicos

Según recoge The Verge, en los centros sanitarios la recomendación que se hace a las personas llamadas para ser vacunadas es que vayan con una camiseta de manga corta que se pueda subir hasta el hombro, o incluso sin mangas. Otra alternativa es el polo, que igualmente es de manga corta.

Se puede llevar algo encima por supuesto, pero a ser posible que sea fácil de quitar y encima de una de estas dos prendas. En el caso contrario, se desaconseja llevar una camisa, que impide remangarte hasta el hombro y te obliga a dejar el pecho al descubierto.

Las imágenes de algunos políticos que se pretenden evitar

A pesar de estas recomendaciones, incluso los políticos, que son los que tienen que dar ejemplo, han ofrecido imágenes poco deseables a la hora de vacunarse. Está el caso del ministro de Sanidad francés, Olivier Véran, con el pecho al descubierto y teniendo que utilizar la camisa para taparse.

Otro político, el primer ministro griego Kyriakos Mitsotakis, se veía en una situación similar por acudir a vacunarse en camisa (como se puede observar en la imagen de arriba). Y un miembro del Parlamento de Reino Unido, Johnny Mercer, directamente se quitó la ropa de la parte superior del cuerpo.