CORONAVIRUS

Doble mascarilla contra el coronavirus: qué tipos usar y cómo ponérsela correctamente

Además de elegir el material adecuado, hay expertos que se están posicionando a favor de usar dos porque puede favorecer a la protección.

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Sebastián Mariscal EFE

Lo dijo recientemente Anthony Fauci, asesor de Joe Biden, presidente de Estados Unidos, a la hora de gestionar la pandemia: “Si tiene una protección física de una capa, se coloca otra capa, es de sentido común que probablemente sea más efectiva”. No es el primer experto, ni será el único, que se posicione a favor de usar la doble mascarilla.

Si ya estaba instaurado el debate sobre qué mascarilla usar y cuál es más idónea para cada grupo de población, se suma la cuestión sobre si usar una o dos y cuáles en cada capa. La más recomendada es la mascarilla FFP2, considerada como aquella que proporciona una mayor eficacia.

Sin embargo, la clave no está en cuántas ponerse, sino en cuáles ponerse y cómo ponérselas. Es fundamental hacer un uso correcto de las mismas y colocárselas de la mejor manera posible para aprovechar toda su capacidad de protección.

¿Qué tipos de mascarillas se deben usar?

Desde un primer momento, la Organización Mundial de la Salud hizo hincapié en la importancia del número de capas que tenga ya una sola mascarilla individual. El número citado fue tres capas, al menos, usando una exterior para salpicaduras y gotas, otra intermedia para filtrar y otra interior para absorber saliva y sudor.

No todas las mascarillas aseguran esto, como las de tela, que serían las que incitan a llevar otra para asegurar una doble protección. Por ello, a la hora de usar una doble mascarilla, según informa Business Insider y corrobora Fauci, se recomienda utilizar una mascarilla de tela de doble capa en el exterior y dentro, para estar más protegido, una quirúrgica desechable.

Es mejor eso que llevar dos mascarillas de una sola capa juntas o del mismo tejido. Y es que llevar doble mascarilla no implica una doble protección. De hecho, los sanitarios, que suelen emplear este método, lo hacen por motivos económicos y así no tener que cambiarse todo el rato las mascarillas N95, que son más caras.

La efectividad de cada material y alternativas

Con una mascarilla quirúrgica por debajo de la mascarilla de tela se conseguirían todos los efectos mencionados, es decir, lo mismo que usando una de tres capas. Con respecto a las de tela, una investigación del New York Post aseguraba que la seda era aconsejable porque contiene propiedades antimicrobianas, antibacterianas y antivirales naturales.

Funcionaría como las quirúrgicas. Incluso se determinó que la seda era mucho más eficaz contra la humedad que otras telas.

Otra alternativa para la doble capa es usar una mascarilla de tela de dos capas con un protector facial por encima, pero no es algo intercambiable, tendría que ser de esta forma. Los protectores faciales están diseñados para la protección ocular y facial, pero no para la respiratoria. Por tanto, no son sustitutivos de las mascarillas y únicamente serían un añadido a estas, aportándoles protección ante líquidos o salpicaduras.