CORONAVIRUS

La vacuna de la triple vírica, un posible escudo frente a la COVID-19

El fármaco capaz de prevenir el sarampión, las paperas y la rubéola podría proporcionar una cierta protección frente a la infección por coronavirus.

La vacuna de la triple vírica, un posible escudo frente a la COVID-19
EFE EFE

Ante la evolución de la pandemia del coronavirus y la falta de la aprobación de una vacuna eficaz que permita una vacunación masiva para frenar, en la medida de lo posible, los contagios por la infección de la COVID-19, los investigadores continúan sus estudios para encontrar alternativas frente a la enfermedad.

Una de las alternativas que se plantean para frenar la expansión del coronavirus es la vacuna de la triple vírica MMR utilizada contra el sarampión, las paperas y la rubéola. Este fármaco podría proporcionar una cierta protección frente a la COVID-19 según un nuevo estudio publicado en la revista científica ‘mBio’.

Los IgG, inversamente relacionados con la gravedad causada por la COVID-19

Anteriormente, los investigadores habían planteado esta cuestión como una mera hipótesis, pero el nuevo estudio demuestra evidencias al mostrar que los niveles de anticuerpos IgG en pacientes vacunados con la MMR ii, producida por Merck, están inversamente correlacionados con la gravedad en pacientes recuperados de la enfermedad del coronavirus. Esta vacuna contiene la cepa de sarampión Edmonston, la cepa de paperas Jeryl Lynn (nivel B) y la cepa de rubeola Wistar RA 27/3.

“Encontramos una correlación inversa estadísticamente significativa entre los niveles de titulación de las paperas y la gravedad de la COVID-19 en personas menores de 42 años que se han vacunado contra la MMR II. Esto se suma a otras asociaciones que demuestran que la vacuna MMR puede ser protectora contra COVID-19. También podría explicar por qué los niños tienen una tasa de casos de COVID-19 mucho más baja que los adultos, así como una tasa de mortalidad mucho más baja. La mayoría de los niños reciben su primera vacuna MMR alrededor de los 12 a 15 meses de edad y una segunda entre los 4 y 6 años de edad", ha explicado el autor principal del estudio, Jeffrey E. Gold.

Un estudio con 80 personas

Para llevar a cabo este estudio, los investigadores dividieron a 80 personas en dos grupos. En el primero, juntaron a 50 individuos nacidos en Estados Unidos que con anticuerpos MMR de la vacuna MMR II. En el segundo estaban las 30 personas restantes que no habían sido vacunadas por la MMR II pero que tenían anticuerpos MMR debido a haber enfermado anteriormente de sarampión, paperas o rubéola.

Con los datos de estos grupos, los investigadores observaron que cuanto mayor era el nivel de anticuerpos de las paperas originados por la vacuna de la triple vírica, menor es la gravedad de la infección del coronavirus, independientemente de la edad del paciente.

Por otro lado, los científicos aseguran no haber encontrado ninguna relación entre la gravedad del coronavirus ni los anticuerpos generados por la vacuna de la triple vírica cuando esos anticuerpos no proceden de la vacuna MMR II.

Una mayor investigación

"Este es el primer estudio inmunológico que evalúa la relación entre la vacuna MMR II y la COVID-19. La correlación inversa estadísticamente significativa entre los niveles de anticuerpos de paperas y COVID-19 indica que existe una relación que justifica una mayor investigación", ha señalado el coautor del estudio, David J Hurley, profesor y microbiólogo molecular de la Universidad de Georgia, en declaraciones recogidas por NIUS.

"La vacuna MMR II se considera una vacuna segura con muy pocos efectos secundarios. Si tiene el beneficio final de prevenir la infección por covid-19, prevenir su propagación, reducir la gravedad de la misma, o una combinación de cualquiera de ellas, se trataría de una intervención de muy alta recompensa y bajo coeficiente de riesgo", concluye el experto.