CORONAVIRUS

Precuarentena, la posible solución para celebrar la Navidad

El principal experto de coronavirus de Alemania, Christian Drosten, alude a la opción de evitar todos los contactos físicos y sociales durante al menos una semana antes de las fiestas.

Precuarentena, la posible solución para celebrar la Navidad

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Los meses pasan, la pandemia no cesa en su impacto y los ciudadanos empiezan a plantearse cómo será la próxima Navidad. Las restricciones impuestas a causa de la segunda ola de la enfermedad que está sufriendo toda Europa y el riesgo de contagio que existe en las reuniones sociales plantean dudas que ha intentado aclarar Christian Drosten, el principal epidemiólogo de Alemania y director de virología de La Charité de Berlín.

Así, la clave para que sea posible disfrutar de una típica Navidad consiste en aplicar el concepto de ‘precuarentena’, según este experto. En concreto, se trataría de evitar todos los contactos físicos y sociales durante al menos una semana antes de las fiestas.

“Cada individuo, por supuesto, debe considerar cómo se puede implementar esto en su propia vida cotidiana”, afirmó Drosten, quien asesora en la crisis del coronavirus a la canciller Angela Merkel. El experto reconoce que no es una medida de aplicación sencilla por las peculiaridades de cada familia: “¿Cómo haces eso cuando tienes niños que van a la guardería o la escuela? ¿Es posible evitar las reuniones durante unos días antes de la visita familiar o trabajar completamente desde casa si el trabajo lo permite?".

Responsabilidad individual

Drosten, que hizo estas declaraciones al periódico alemán Die Zeit, alude a la responsabilidad individual para hacer frente a la pandemia y poder vivir con cierta normalidad. “Las personas tienen que sopesar los riesgos de una pandemia por sí mismas. No existe una seguridad absoluta, siempre existen riesgos residuales", afirmó.

El virólogo pide que los ciudadanos apliquen el sentido común antes de actuar para evitar riesgos. “Todo se reduce a muchas pequeñas decisiones cotidianas. Por ejemplo, cuando sales a comer y te surge la pregunta de si debes o no entrar aunque esté bastante concurrido. Entras o dices: 'Sí, hace frío, pero sentémonos afuera otros 15 minutos y luego vayamos a casa'. O la cuestión de si realmente tienes que organizar esa fiesta que habías planeado este invierno; quizás puedes encontrar un espacio más grande o posponerla", explicó.

“Ninguna de estas cosas está prohibida y nadie puede ni quiere regularlas. Todos debemos tomarnos la situación en serio, incluso cuando estamos tratando de tener una vida cotidiana normal. Todos tenemos que desarrollar la conciencia situacional adecuada", añadió.