Aumentan las discrepancias entre el Gobierno y la Comunidad de Madrid. Desde el Ejecutivo central insisten en la necesidad de confinar toda la ciudad y los municipios que superen los 500 contagios por 100.000 habitantes, como manifestó este viernes Salvador Illa, ministro de Sanidad. Sin embargo, Isabel Díaz Ayuso prefiere seguir optando por restringir solo las zonas más afectadas. No obstante, la presidenta está dispuesta a establecer este criterio siempre y cuando ese cierre se decrete también en el resto de municipios españoles y que se realicen pruebas PCR en Barajas, en el AVE y en el resto de viajes por tren, según adelantó la Cadena Ser.

En mitad de esta batalla campal, el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, ha pedido una tregua. “Urge un alto el fuego político”, ha escrito en su cuenta oficial de Twitter, donde ha señalado que los madrileños “merecen” que los políticos acuerden “conjuntamente” las medidas para proteger su salud, por lo que les ha instado a estar “a la altura”. En esta línea, asegura haber trasladado a Salvador Illa y Carolina Darias, ministra de Política Territorial, “la necesidad de continuar con las reuniones” entre la Comunidad de Madrid y el Gobierno central para acordar conjuntamente las medidas en Madrid.

Bouza dimitió a causa de estas diferencias

La última consecuencia de esta creciente tensión entre el Gobierno central y el madrileño ha sido la dimisión de la dimisión del doctor Emilio Bouza como portavoz del Grupo COVID-19 de la Comunidad de Madrid tan solo 48 horas después de ser designado para el puesto tras su elección por consenso entre el Gobierno regional y el central. Al parecer, tomó la decisión después de la reunión entre Pedro Sánchez y Díaz Ayuso, debido a las discrepancias que vio entre ambos.

Bouza solo había participado en una reunión del grupo, la que mantuvieron el pasado jueves el ministro Illa, la ministra de Política Territorial y Función Pública, Carolina Darias y los consejeros Ignacio Aguado y Enrique Ruiz-Escudero. Dicha cita fue aprovechada para realizar su presentación oficial.

El Gobierno se prepara para actuar

Según revela El Periódico, desde Moncloa estarían dispuestos a actuar con contundencia para contener la expansión del coronavirus en Madrid, actual epicentro de contagios en España. Tras el ultimátum lanzado por Illa el viernes, cuando pidió a la Comunidad que revisara las medidas y siguiera las recomendaciones, desde Moncloa esperan que la Ayuso rectifique y endurezca las restricciones, pero también están preparados para “tomar el control” si es necesario. "Estamos estudiando el tema en profundidad, mientras esperamos que Madrid revise sus medidas. Hay muchas posibilidades de reacción y ninguna está descartada", han manifestado fuentes del Ejecutivo conocedoras del proceso de toma de decisión en dicho medio.

 El Periódico sostiene que una de las opciones que se plantean es aplicar la ley general de salud pública de 2011, que sería la más suave porque no conllevaría quitar competencias autonómicas. Pero el Gobierno tampoco descarta decretar el estado de alarma en Madrid para tener un campo de actuación más amplio. Una tercera opción sería aplicar el decreto ley de una nueva normalidad, del pasado 9 de junio. "Con carácter excepcional y cuando así lo requieran motivos de extraordinaria gravedad o urgencia, la Administración General del Estado promoverá, coordinará o adoptará de acuerdo con sus competencias cuantas medidas sean necesarias para asegurar el cumplimiento de lo dispuesto en este real decreto-ley, con la colaboración de las comunidades autónomas", recoge el artículo 3 de la norma.