El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, se ha mostrado “preocupado” ante posibles rebrotes por coronavirus en la capital. En una entrevista en Telecinco, el regidor ha abogado por confinamientos selectivos “por zonas” o para “colectivos vulnerables”, en caso de que vuelvan a aumentar los casos, porque “la situación económica de Madrid no permite dar un paso atrás”. “Un confinamiento masivo conllevaría deterioro de la economía, tendría efectos devastadores”, ha añadido, a la vez que ha puesto como ejemplo el caso de Lisboa, que ha confinado 19 de los 24 distritos de la ciudad.

Sin embargo, Martínez-Almeida ha reconocido que “desde el punto de vista sanitario y asistencial” la capital tiene ahora “mejores condiciones” para afrontar un posible rebrote, aunque ha indicado estar “preocupado” por si finalmente se produce. El alcalde ha alabado el trabajo de los servicios público de todas las administraciones por su capacidad para “rastrear brotes” y porque “han demostrado que saben estar a la altura de las circunstancias”.

Controles en Barajas

Sobre los controles que se están efectuando en el aeropuerto de Barajas, Martínez-Almeida apuesta por hacer test aleatorios de coronavirus a los viajeros que lleguen a la capital. “Los medios son insuficientes en Barajas, es el principal punto de acceso internacional a España. Es necesario reforzar las medidas de seguridad para poder hacer un seguimiento de posibles infectados que lleguen hasta nuestra ciudad”, ha comentado.

Además, ha pedido que se exija a los pasajeros procedentes de zonas de riesgo una prueba PCR negativa para evitar que Barajas sea una vía de entrada para el virus. El primer edil ha explicado que la recuperación del turismo se debe cimentar sobre la imagen de que la capital es una ciudad segura. “Para ello hay que controlar Barajas”, ha aseverado.

Sobre la aprobación este jueves en el Congreso del decreto de la nueva normalidad, Almeida considera que “es una buena noticia para los españoles” porque en caso de tener que afrontar rebrotes hay "instrumentos adecuados”. Por último, ha reclamado al Gobierno central poder gastar la parte del superávit que no se ejecutó en anteriores (unos 400 millones) para hacer frente a la crisis que ha desencadenado la pandemia, porque de lo contrario se destinará al pago de la deuda de forma anticipada.