Estados Unidos se encuentra en una tesitura complicada. Con más de 1.100.000 casos de contagio y 63.766 víctimas a causa del coronavirus, la gente se inclina a favor o en contra del confinamiento, achacando en muchos casos que se les priva de la libertad de salir a las calles.

Ayer mismo, en Lansing, en el Capitolio de Michigan, un grupo de manifestantes simpatizantes de Donald Trump, irrumpió en el edificio al grito de "déjennos entrar" con armas largas mientras la gobernadora, Gretchen Whitmer, declaraba sobre si debían o no extender la declaración de emergencia por la COVID-19.

La senadora local, Dayna Polehanki, que también se encontraba en el capitolio, daba un mensaje a través de su cuenta de Twitter que decía lo siguiente: "Directamente sobre mí, hombres con rifles nos gritan. Algunos de mis colegas que poseen chalecos antibalas los llevan puestos. Nunca he apreciado a nuestros sargentos tanto como hoy". Además, el tweet contiene una imagen en la que aparecen varios de los manifestantes -uno de ellos con un rifle a la espalda-.

La NBC News pudo contactar con un portavoz de la Policía para informar acerca del suceso, a lo que este señaló que es legal que las personas puedan llevar armas mientras estas sean visibles en todo momento.

Michigan cancela la prórroga del estado de emergencia

La Cámara de Michigan optó por rechazar la extensión del estado de emergencia por 28 días a causa de la pandemia, tal y como quería desde el inicio su gobernadora demócrata.

Por otro lado, los legisladores, liderados por los republicanos, defendieron varios proyectos ante la cadena local ABC 12 News para reemplazar la decisión tomada por Gretchen Whitmer -gobernadora y posible aspirante a la Vicepresidencia por el bando demócrata-.

Lee Chatfield, presidente de la Cámara de Representantes de Michigan, señaló que: "La gente merece una mejor solución. Es desenfrenado y antidemocrático", refiriéndose a la decisión tomada por la gobernadora.