Desde que se decretó el estado de alarma el pasado 14 de marzo, España ha estado inmersa en un estricto confinamiento hasta el alivio progresivo de las medidas. Por ello, y desde que se permitió la salida de los domicilios, los planes que más interés han generado son al aire libre.

Esto podría acarrear muchas consecuencias. Así lo afirma Pilar López Criado, jefa de la Sección de Tumores de Pulmón, Cabeza y Cuello y Melanoma de MD Anderson Cancer Center Madrid: “Puede haber un repunte de casos de melanoma. La preocupación es que prevemos que va a haber una exposición masiva al sol sin protección; la gente tiene muchas ganas de salir a la calle, pero no de proteger su piel”.

Siempre con protección

López Criado advierte la necesidad de protegerse del sol incluso al salir a la calle: “Claro que hay que salir, caminar y hacer ejercicio al aire libre, pero siempre con una protección solar de 30 o más e intentando evitar las horas centrales del día, entre las 12 de la mañana y las 5 de la tarde”. Aunque según la experta, "el problema es que las consecuencias no las vamos a ver a corto, sino a largo plazo".

Respecto a las personas que han sufrido la enfermedad y que con la llegada del buen tiempo se expongan al sol, admite que "no sabemos qué efectos pueden tener para la piel algunos de los tratamientos que hemos usado para la COVID-19; algunos fármacos han provocado lesiones en la piel, otros son fotosensibles… por lo que sería recomendable una consulta previa con el dermatólogo en caso de duda”.

El peligro del gel hidroalcohólico

En nuestro a día a día, además de la mascarilla, está el uso del gel hidroalcohólico para incrementar las medidas higiénicas. Pero se trata de un producto contraindicado si se va a tomar el sol: "Si utilizamos este gel y después nos exponemos al sol, nos podemos abrasar”. Debido a esto, la recomendación principal es lavarse las manos y utilizar crema con el factor de protección adecuado para nuestra piel.