Paul George sigue a lo suyo
Sexta victoria consecutiva de los Clippers, de nuevo con Paul George como líder. Los Heat, sin Jimmy Butler, pierden sus dos duelos en Los Angeles.
Los Clippers están de dulce. Y son, en estos momentos, el mejor equipo de la NBA. Algo raro si tenemos en cuenta la historia de un equipo pequeño con ínfulas de grandeza, creado por el tacaño Donald Sterling y que lo único que hizo en sus inicios fue malvivir de las migajas de los Lakers que Jerry Buss dejó cuando adquirió la franquicia, allá por 1979. La historia reciente de los Clippers, pues, ha cambiado radicalmente la que no es tan reciente, con Steve Ballmer convirtiéndose en dueño de la franquicia después de que Sterling y el escándalo que provocaron sus comentarios racistas tuvieran que salir por la puerta de atrás de la NBA. Un episodio magníficamente resuelto, por cierto, por un recién llegado Adam Silver, que evitó el boicot de los jugadores y se hizo con la situación gracias a su privilegiada mente y su discurso magnético.
Más allá de todo eso, los angelinos han ascendido un peldaño más. Sin Kawhi Leonard, ese ser misterioso al que nadie conoce ni cree conocer, los Clippers se han hecho parcialmente con el beneplácito de la opinión pública, ese lugar en el que se ganan y pierden las batallas que deciden las guerras. Lo están haciendo en un inicio de temporada fantástico, en el que empezaron 1-4 y ahora están 7-4. Pero también, claro, en los últimos playoffs, en un ejercicio de resiliencia extraordinario que les llevó a las primeras finales de Conferencia de su historia. Ya solo hay dos equipos que nunca han pisado esa ronda: Hornets y Pelicans. Intrínsecamente relacionados, con vidas paralelas y una historia tan pequeña como su base social. Los Clippers ya están, tras muchos descalabros y esfuerzos, a otro nivel. Por fin.
Ante los Heat, los Clippers han sumado su sexta victoria consecutiva. Una racha en la que han caído Thunder, Timberwolves por partida doble, Hornets, Blazers y Heat. Y ahora, tienen tres partidos más en casa ante Wolves, Bulls y Spurs. El segundo de ellos será realmente interesante; los otros dos rivales, en teoría, más factibles. En lo referente a Miami, los Heat llegaban castigados por las bajas, especialmente la de Jimmy Butler, que con molestias en su rodilla derecha sigue de baja. En total, los de Florida suman tres derrotas consecutivas, dos contra equipos de Los Angeles en dos encuentros (y en back to back) que han perdido por tan solo tres puntos, el primero de ellos en la prórroga. Y, aunque no están ni mucho menos en una situación preocupante, han dejado, al menos momentáneamente, de ser ese equipo de los duelos iniciales que algún analista metía en las quinielas por el anillo.
Los Heat empezaron volando en el Staples Center: 40 puntos en el primer cuarto. Tyronn Lue no tardó en hacer los ajustes necesarios para que en el combinado del segundo y tercer periodo, los de Erik Spoelstra anotaran menos puntos (38) que en los 12 minutos iniciales. Eso sí, los Heat no se rindieron y transformaron un resultado de 108-100 a 1:48 para el final (tras un triple de Reggie Jackson), en uno de 108-107 con algo más de 40 segundos por jugarse y merced a un impresionante 2+1 de Kyle Lowry. Y el final del partido, más que en acertar más, se basó en fallar menos: Jackson anotó dos tiros libres, Lowry respondió (110-109), Jackson anotó otros dos tiros libres y PJ Tucker, tras tiempo muerto, perdió el balón en un mal pase que interceptó otro veterano, Nicolas Batum. Y ahí sentenciaron los Clippers, que vieron muy de cerca el connato de rebelión, el amago de remontada. Pero resistieron con solvencia y templanza en un minutos final taquicárdico.
Paul George volvió a ser, claro, el mejor jugador del partido: 27 puntos, 4 rebotes y 5 asistencias para él. Zubac sumó 18+11, Reggie Jackson 22 puntos (y los últimos 7 de su equipo), Bledsoe 21 y Luke Kennard otros 12 desde el banquillo. En los Heat, Bam Adebayo castigó en demasía la pingtura rival: 30 tantos con 11 rebotes. Tucker, a pesar de la última pérdida, hizo buenas labores defensivas (6+10), Tyler Herro anotó 23 puntos y atrapó 7 rebotes (pero hizo 0 de 6 en triples) y Lowry, siempre clarividente, se fue a 25+5, con un buen 9 de 17 en tiros de campo. El triple fue una tortura para los Heat (9 de 41, un 22%), que ganaron la batalla por el rebote (50-42) pero no pudieron gestionar la ventaja inicial ni remontar al final. Eso sí, ante estos Clippers ya se necesita una marcha más para rascar una victoria. Un equipo compensado, enormérrimo y que está jugando mejor que nadie. Y con Paul George de líder. Casi nada.