Las opciones que ofrece internet me han llevado a ver el Barça en canales insospechados.
Pesimistas y optimistas del Barça se encuentran en un laberinto de dudas.
El dato que más se destacó del primer partido de Quique Setién en el banquillo del Barça fueron los 1.005 pases que dieron sus jugadores.
Le desearemos éxito en su exilio, con un poco de egoísmo, para que el próximo entrenador del Barça traiga de vuelta al chico de Mataró.
Hoy el Madrid tiene fútbol y poco gol, y el Barça tiene mucho gol y más bien poco juego.
No es raro que los jugadores se sientan desquiciados, incomprendidos, pues sus decisiones también tienen tintes kafkianos, sin explicación lógica.
Dembélé necesita paciencia y confianza, aunque no sé si en este Barça disperso de Valverde la encontrará.
El martes, ante el Valladolid, Leo Messi consiguió otra cifra redonda para su catálogo fabuloso. Cincuenta goles de tiro libre a lo largo de su carrera.
Parcos en palabras y en el uso de las subordinadas, la mayoría de futbolistas agradecían esa zona segura que les permitía, en una frase corta, opinar sobre su ídolo infantil...
A ratos, la situación de los futbolistas ingleses de hace 60 años, descrita por Henderson, recuerda la que viven las mujeres futbolistas en la actualidad.
Si yo fuera Josep M. Bartomeu, hoy mismo le preguntaría al Cruyff de acero cómo ve el posible fichaje de Neymar.
Página4