El gol que le falta a Messi
Los delanteros jóvenes quieren marcar todos los goles en una misma jugada y cuanto antes mejor. Les llega el balón y en un milisegundo tienen que resolver. Los mejores dejan que el instinto decida por ellos y suele ser la mejor opción, pero otros dudan, las posibilidades se acumulan y al final la jugada queda en nada. El típico chupón del área es un buen ejemplo de este aturullamiento. Partido a partido, los delanteros van llenando su catálogo de goles. Con la izquierda, de cabeza, de chilena, de tiro libre, regateando al portero... Frente a ese deseo de dejar huella, está la paciencia y la calma del que tiene confianza en sí mismo. Una de las virtudes de Ansu Fati, por ejemplo, es que juega con una pausa poco habitual para alguien tan joven.
El martes, ante el Valladolid, Leo Messi consiguió otra cifra redonda para su catálogo fabuloso. Cincuenta goles de tiro libre a lo largo de su carrera —44 en el Barça—. Viendo con qué finura su pie izquierdo acaricia el balón, resulta increíble que en el catálogo de Messi falten algunos goles. Pienso sobre todo en el gol olímpico, es decir, de córner directo, para el que se requiere una precisión de toque, velocidad y dirección parecida a la del tiro libre. Cuentan que en los entrenamientos lo ha conseguido en más de una ocasión, y hay constancia de un intento que casi le salió bien, en un partido frente a Las Palmas. Como podría haber dicho el propio Messi, "por ahora no se ha dado".
La virtud de ser paciente en un mundo tan frenético como el del fútbol me recuerda a una historia china que contaba el escritor Italo Calvino. Un rey le pidió a un pintor que dibujara un cangrejo. El pintor le dijo que necesitaba cinco años. Pasaron los cinco años y ni siquiera había empezado. Luego le pidió al rey cinco años más y éste se los concedió. Al cabo de ese tiempo, un día el pintor llegó frente al rey y en un instante, con un solo gesto, pintó el cangrejo más perfecto que se haya visto nunca. Paciencia, pues, queda tiempo para que Messi marque un gol olímpico.