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La autopsia al joven actor Matthew Mindler confirma los peores temores

La estrella infantil desapareció la semana pasada y el sábado fue hallado sin vida en un lugar próximo al campus de la Universidad en la que estudiaba.

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La autopsia al joven actor Matthew Mindler confirma los peores temores

Fue una estrella infantil en su niñez y compartió reparto con actores de la talla de Paul Rudd, Elizabeth Banks o Zooey Deschanel, pero la vida de Matthew Mindler había cambiado mucho en los últimos años. Sin embargo, nada podía hacer presagiar que su etapa como estudiante alejado de la interpretación podría terminar de una manera tan abrupta. El joven de 19 años desapareció hace una semana y tres días más tarde su cuerpo fue hallado sin vida en un lugar muy próximo al campus de la Universidad de Millersville (Pensilvania) en la que estudiaba.

Desde el primer momento, las autoridades, tras días de intensa búsqueda, sospecharon que las circunstancias en las que se había producido el fallecimiento eran un tanto extrañas. Pero ahora la oficina del forense del condado de Lancaster ha dado a conocer el resultado de la autopsia y han confirmado lo que muchos temían: Matthew Mindler se suicidó.

El actor debutó en la industria del cine y la televisión con tan solo 7 años gracias a un episodio de 'As The World Turns' y dos años después llegaría su gran momento con 'Our Idiot Brother'. Su última aparición se produjo en 2016 en una película para televisión titulada 'Chad: un chico americano', y hace tan solo unas semanas había comenzado las clases en la Universidad. Todo parecía normal, pero el martes 24 de agosto a las 20:11 de la tarde, fue cazado por las cámaras de seguridad de la residencia en la que vivía en el campus. Era la última que se le veía con vida. Unas horas después se denunció su desaparición, pero días más tarde se comprobó que todo había terminado.

La madre de Mindler habló con el portal estadounidense TMZ y confesó que su hijo había padecido graves problemas de ansiedad durante los últimos años, si bien nunca llegó a imaginar que eso le podría conducir a quitarse la vida. Monica explicó que estaba convencida de que estaba disfrutando de su primera semana universitaria en un campus al que había llegado el 19 de agosto, que todo iba bien hasta que desapareció. De hecho, asegura que su hijo estuvo en contacto con ella durante esos primeros días y que le dijo que estaba muy ocupado planeando diferentes proyectos. Entre ellos, un club de programación del que ya había hablado con un asesor y hasta tenía una entrevista con el departamento de la Universidad para ponerlo en marcha.

El martes por la noche, el día de su desaparición, se produjo el último mensaje entre madre e hijo. Monica le dijo que iría a recogerlo el viernes para pasar juntos el fin de semana: "Quería que volviera a casa y se relajara durante unos días, sabía que luchaba con una ansiedad paralizante". A la mañana siguiente le envió un nuevo mensaje, pero ya no obtuvo respuesta.