'Fast&Furious 9': el regreso de Justin Lin convierte los orígenes de Toretto en espectáculo
La saga suma una nueva película en la que nos invitan a descubrir la historia de Dominic Toretto con una extraordinaria fusión de acción, intriga y espectáculo.
El regreso de Justin Lin a 'Fast&Furious' es una de esas incorporaciones que a cualquier espectador ilusiona. También le crea expectativas imposibles de cumplir como repetir el éxito de la tercera, cuarta, quinta y sexta películas de la saga, especialmente la operación imposible que el equipo de Dom Toretto protagonizó en pleno Río de Janeiro. El director taiwanés vuelve a dotar a la saga de una idea original en la que no faltan las escenas de acción y los imposibles que se plasman en 'Fast&Furious 9'.
Bajo esta dirección, en la novena entrega consiguen convertir el mayor defecto de 'Fast&Furious' en una virtud sobre la que sacar pecho. A lo largo de estos 20 años se ha criticado a la saga por ser demasiado previsible, por no dar un giro de guión cada vez que el equipo de Toretto está contra la espada y la pared. Esto es algo sobre lo que han querido incidir, y de manera muy acertada, en numerosas escenas, las cuales siempre coinciden con ese desahogo de humor que recoge la tensión. Además de destacarlo, en 'F9' se lleva tan al límite que alcanza el infinito de lo imposible.
¿Por qué siempre se salen con la suya? Una pregunta sin respuesta con la que en 'Fast&Furious 9' se conecta constantemente el pasado con el presente, e incluso con el futuro en una de esas escenas con las que al fan de la saga se le ponen los pelos de punta. Por primera vez descubrimos el pasado de Dom Toretto y encontramos al tercero de la familia: Jakob. Sólo un guión tan fino como el de Daniel Casey puede utilizar la familia de sangre para ensalzar a la verdadera familia que rodea a Dom Toretto y que durante toda la saga ha elegido.