Nuria Roca desvela que pasó por quirófano para acabar con un complejo

Hace una semana, Nuria Roca y Pablo Motos se enzarzaron en un juego de preguntas y confidencias en El Hormiguero en el que la colaboradora reveló que había pasado por el quirófano para una operación de cirugía estética. No obstante, para eludir revelar qué parte se había retocado pulsó el botón rojo que ejerce como comodín o vía de salvación.

El presentador del programa de las hormigas no se quedó contento con la respuesta e inició una investigación durante toda una semana para poner de nueva a Roca entre la espada y la pared. Y consiguió su propósito: la protagonista de la historia desveló que se había operado las orejas.

Según sus palabras, las tenía de soplillo, lo que le había creado un verdadero complejo cuando era pequeña. "Yo salía de la piscina tapándome las orejas y ahora lo sigo haciendo porque eso no se olvida. Sueño que se despegan", explicó.

Además, destacó que el mismo trauma la ha perseguido también en su edad adulta tras la operación, hasta el punto de pensar en ello inmediatamente después de dar a luz. En sus propias palabras, confesó que lo primero que preguntó después de que naciera su bebé era si tenía las orejas pegadas.

Ahora el temor de Nuria Roca es que puedan salir fotografías que rememoren su trauma, con el pelo recogido y previas a pasar por el bisturí. El propio Pablo Motos aseguró tener alguna imagen, pero no las publicará ante la negativa de la colaboradora.