Su (semi) final está en Son Moix
Normalmente nadie se acuerda de los equipos que caen en cuartos de Copa, pero el Cádiz no será uno más. Los de Sergio perdieron con honor, terminando con diez jugadores por la expulsión de Cala y muriendo en la orilla con ocasiones para empatar. Los amarillos son un equipo en reconstrucción con un nuevo entrenador que poco a poco va sembrando sus ideas; y aunque la eliminación pueda doler más o menos, su verdadera (semi) final llegará este sábado contra el Mallorca, en un encuentro que les puede permitir salir del descenso.
Del partido de Mestalla el Cádiz debe quedarse con su reacción tras el primer gol encajado. Con la valentía con la que salió al ataque en busca de la igualada y con lo bien asentados que se ven a las nuevas piezas en tan sólo un partido. Lucas Pérez, que salió casi sin calentar por la lesión de Andone, debutó marcando (de penalti). Luis Hernández demostró jerarquía en defensa. Alcaraz estuvo imperial en la medular y a Idrissi se le vio voluntad en la banda tirando de desborde siempre que tuvo ocasión. La eliminación no ensombrece el esfuerzo de los amarillos que cayeron con honores.
Borrón y cuenta nueva. Hay que quedarse con todo lo bueno (que es mucho) y pensar en la salvación en LaLiga. Ahora lo que viene es muy importante y eso está a la vuelta de la esquina. El sábado espera el Mallorca en Son Moix. Toda una auténtica (semi) final por la permanencia.