Se busca entrenador valiente

Si hubiera una sección de anuncios clasificados en este periódico deportivo, evidentemente mi artículo de esta semana estaría enmarcado en ella. Tercera derrota de forma consecutiva y con un bagaje de 6 goles encajados y ninguno anotado en los últimos tres encuentros. No son números ni muchísimo menos aceptables para un equipo que aspira ascender a Primera División esta temporada. Ese equipo valiente y agresivo que nos prometió Pacheta en la rueda de prensa de su presentación como entrenador del Real Valladolid no se ve por ningún lado, pero si vemos un equipo sin personalidad, sin conjuntar, débil, sin ideas de juego e incapaz de controlar ninguno de los partidos disputados hasta la fecha. ¿Dónde está ese entrenador valiente que se presentó en la sala de prensa del estadio José Zorrilla el 17 de junio?

Con la de palos que se llevó el anterior entrenador, Sergio González, por salir a empatar los encuentros en Primera División con una plantilla muy justita en su primer año en la categoría de oro del fútbol español. ¿Qué pensará ahora el extécnico del cuadro blanquivioleta cuando vea la propuesta del actual entrenador en Segunda División? Solo hay que leer las declaraciones de Míchel, entrenador del Girona: "Hemos ganado al equipo con más presupuesto y que tiene una plantilla de Primera División y sin nuestra mejor versión". Y dice la verdad, no es ni la opinión de un aficionado ni la de un periodista deportivo, es la de un entrenador de fútbol profesional y es que lo ve hasta un ciego.

Con los futbolistas que tiene actualmente el Real Valladolid: ¿Se puede jugar mejor al fútbol? ¿Da para ganar los encuentros que se han perdido de forma consecutiva? Un buen entrenador adapta los futbolistas que tiene al sistema de juego donde mejor pueden explotar sus cualidades individuales. Ese sistema en el que confía ciegamente Pacheta al inicio de los partidos no está funcionando, y cuando ya están completamente perdidos...cambia el sistema de juego y el equipo mejora. Mi pregunta es la siguiente: ¿Por qué no sale con ese sistema de inicio en los partidos? Frente al Girona, Pacheta planteó un partido demasiado defensivo, por el miedo a perder de nuevo. ¿Y qué pasa por norma general en el fútbol cuando un equipo sale a empatar los encuentros y no a ganar? Que se terminan perdiendo, ya sea por un error propio o del rival, por una decisión injusta del árbitro, por esos pequeños detalles del fútbol.

La dura y cruda realidad, es que el Real Valladolid por juego y resultados, está más cerca de militar en la categoría donde lo hace su filial que de retornar a Primera División y eso es responsabilidad del entrenador del equipo. El próximo rival en el José Zorrilla es la AD Alcorcón, el colista de la categoría que viene tras recibir una goleada en su casa y con nuevo entrenador. Está muy bien que Pacheta demande tranquilidad, pero la temporada pasada el club tuvo demasiada con el anterior entrenador y el equipo acabó en Segunda División. Esperemos que el presidente y máximo accionista del club, Ronaldo Nazário, haya aprendido la lección y si la cosa no mejora no le va quedar otra que tomar decisiones drásticas a tiempo.

Llegó la hora de los valientes y el partido frente a la AD Alcorcón en el Zorrilla es una auténtica final, no sólo se debe ganar, sino hacerlo con buen fútbol y con contundencia. Si el equipo tiene pólvora arriba, el entrenador debe estar obligado a usarla. Pacheta tan solo debe hacer lo que prometió en su primera rueda de prensa, ser valiente, agresivo y ofensivo. Herramientas tiene de sobra para ello, con un frente de ataque encabezado por la pareja de delanteros Weissman y Cristo ó Sergio León, acompañados en las bandas por Gonzalo Plaza por la derecha y por la izquierda por Toni Villa o Nacho jugando como extremo izquierdo. Cualquier otra alineación no sería entendible, y si vuelve a salir de inicio con el mismo sistema de juego, volverá a pasar lo mismo que en anteriores partidos por muy colista que sea el rival. Con Weissman muy soólo arriba como único delantero y con los tres centrales, el equipo no funciona ni en ataque ni en defensa. Si el equipo no logra una victoria convincente frente al colista de la categoría, lo ideal sería plantearse un cambio de entrenador para buscar un cambio de tendencia de resultados y un nuevo rumbo para el equipo. Esperemos que esto no suceda, y Pacheta sea valiente desde el inicio del partido con el sistema de juego y la alineación, el equipo logre una victoria holgada y vuelvan las aguas a su cauce.