Tres puntos más a la espera de Mbappé
Significativo: Ancelotti dejó esta vez fuera a Hazard, titular en los dos partidos previos (discreto en Vitoria, flojo en Valencia) y dio entrada a Vinicius, brillante en ambos partidos cuando salió, precisamente, en sustitución del belga. A la espera de que venga o no Mbappé, el entusiasta brasileño ha subido un escalón así que no es extraño que el Madrid acaricie la idea de que Hazard pase a la Juve, ahora que se ha ido Cristiano. Es curioso esto de que LaLiga empiece antes de que estén del todo hechas las plantillas. Y no es sólo la nuestra, son todas. Justo estos días se está acelerando el mercado, tan mortecino todo el verano excepto en la Premier.
Pero estaba en Vinicius. Él fue el agitador del juego del Madrid en los primeros minutos del partido, pero el equipo no le siguió. Alaba, tan buen apoyo en Valencia, fue esta vez central y se notó. Tampoco Isco repitió su exhibición del Ciutat de Valencia, de manera que Vinicius se fue quedando aislado. Por el otro día había pocas noticias de Bale y Carvajal. El Betis empezó a carburar, vía Canales y Fekir, espléndidos ambos, y el partido fue tomando un tono bético hasta que cerca del descanso se embroncó por una sucesión de brusquedades absurdas que obligaron a Hernández Hernández a un uso de la tarjeta que pareció excesivo sin serlo. Eran justas.
El Madrid volvió del vestuario con una velocidad más y mejor tono en sus individualidades. El premio del gol llegó vía una aparición de Carvajal para cruzar un gran pase de Benzema. Ya encarrilado el partido, Ancelotti hizo sus cambios, entre los que estuvieron Asensio, de nuevo en la media, que parece será su destino, y Hazard, que rozó el gol pero no lo culminó. El Betis refrescó a hombres fatigados, fue mejorando y la presencia final de Joaquín resultó amenazante. Un remate de Montoya en el 96’ olió a empate, pero ahí estaba Courtois. El Madrid cierra este miniciclo con 7 puntos en 3 salidas. Y ahora, a esperar a Mbappé.