La decisión del Madrid de optimizar la amplia plantilla que ha ido labrando estos años (ahora, 31 jugadores) ha provocado un cierto atasco en algunas operaciones de futbolistas jóvenes que estaban despuntando en Europa. Mejor para sus clubes. Los hay que han preferido quedarse para esperar tiempos mejores para la Casa Blanca. Hay tres casos muy claros. El principal, Camavinga. Una suerte que el centrocampista de 17 años, la gran irrupción en el fútbol francés que acaba de ser convocado por Deschamps, haya optado por quedarse un año más en el Rennes cuando tenía a los principales clubes del continente llamando a su puerta (Bayern, PSG, Juve...). El verano que viene estará en su último año de contrato y saldrá a un precio espectacular.

Los otros dos nombres son de centrales. Badiashile y Upamecano (19 y 21 años respectivamente). Ambos, como Camavinga, recomendaciones específicas de Zidane. Tiene el técnico francés muy buen ojo con los jóvenes. Lo demostró con Varane, que llegó por 11 millones del Lens cuando tenía 17 años. En este caso los tiempos también corren a favor del Madrid. Parece que los dos se quedarán un año más en Mónaco y Leipzig y que la entidad blanca podrá elegir el próximo verano, justo cuando muy probablemente Nacho, que termina en 2022, pida que le dejen salir buscando su último gran contrato. Corren tiempos de crisis. Se trata de aguantar para salir más fortalecido.