Doble lucha por el número uno
Dos españoles han salido este lunes como números dos en sus respectivos deportes: Jon Rahm, en la clasificación de golf, y Rafa Nadal, en la de tenis. Ambos están peleando por sentarse en el trono mundial, lo que ya dice mucho de sus prestaciones, lo ocupen o no. Son casos muy diferentes, el de un deportista que hace el viaje de ida y el de otro que ya ha sacado el billete de vuelta.
Jon Rahm todavía no se ha encaramado a esa posición, aunque el domingo la saboreó virtualmente durante buena parte del World Championship de México, que llegó a liderar en varias fases. Al final terminó tercero, un gran resultado que confirma la regularidad del vasco, pero que no sirvió para derrocar a Rory McIlroy. La próxima oportunidad llegará a mediados de marzo en The Players, el considerado quinto major. Y si no lo alcanza ahí, habrá más ocasiones. El vizcaíno de Barrika tiene 25 años, una edad que le abre un enorme porvenir, aunque en el golf hay que ser muy prudentes, porque se trata de una disciplina en la que las victorias se reparten mucho más que en otros circuitos individuales.
Rafa Nadal es un asiduo en la cúspide mundial, que ha paladeado durante 209 semanas, repartidas en diez años distintos. El número uno ya no lo ve como un objetivo en sí mismo, lo ha degustado con frecuencia, sino que se alza como el fruto de los buenos resultados. Como repite habitualmente el propio Rafa, sólo si hay salud se pueden ganar torneos, y sólo con victorias se puede encabezar el ranking. Esta semana reciente arrancada, Nadal vuelve a disponer de opciones matemáticas de recuperar el sillón. Novak Djokovic y él compiten en torneos ATP 500, en Dubái y Acapulco, respectivamente. Si Nole perdiera en los cuartos de final y el español elevara el trofeo, Rafa escalaría otra vez a la cumbre del tenis. Ocurra o no, lo importante es que lucha ahí arriba. Igual que Rahm.