Llegué demasiado tarde a España para conocer la gran época de "Héroes del Silencio" pero siempre me ha encantado el nombre de este mítico grupo de música. En un mundo en el cual la gente se siente casi obligada a dar su opinión sobre cualquier cosa, a criticar, a juzgar a todo tipo de profesionales sin ningún pudor, los que saben guardar el silencio podrían ser considerados como auténticos héroes. Algo totalmente imposible cuando se trata de fútbol, y del Madrid en general.

No sería mejor cerrar la boca en vez de machacar a Zinedine Zidane, por ejemplo, por no convocar a James Rodríguez y a Gareth Bale para el partido de Champions contra el Brujas del pasado martes? Les puedo asegurar que el colombiano tenía un golpe que necesitaba precaución por parte del cuerpo técnico y que el galés se resentía de un aductor y que el sentido común invitó a Zizou a no arriesgar con él. Muchas personas, desde un lado o desde el otro lado de la frontera del madridismo, habla demasiado. "El silencio es oro" dice el refrán… Pues, por desgracia, el mundo del fútbol está lleno de hojalata.