El VAR es una bendición para el Real Zaragoza. Ya lo fue en la primera jornada ante el Tenerife, con ese penalti sobre Álex Blanco que el árbitro había sacado fuera del área y que permitió a Javi Ros cerrar la primera victoria de la temporada, y todavía lo ha sido más esta noche, cuando sacó de dudas sobre una patada dentro del área de Andoni López a Luis Suárez que el colegiado Areces Franco juzgó inicialmente como una simulación del colombiano. ¡Bendito VAR! ¡Bendita justicia! Luis Suárez no perdonó a Edgar Badía desde los once metros y firmó un triunfo tan justo como agónico del equipo aragonés, que no respiró hasta el minuto 87 después de un acoso sostenido y valiente sobre la portería rival. Pero tanto fue el cántaro a la fuente del Elche que se acabó rompiendo, VAR mediante, en favor de un Zaragoza que duerme líder del campeonato a la espera de completarse la tercera jornada.

Todo el partido fue un ataque decidido y continuado del equipo de Víctor Fernández, que lo intentó todo hasta conseguir la victoria, una victoria merecidísima, pero que se hizo esperar demasiado y que tuvo La Romareda en un puño durante el cuarto de hora final. El Zaragoza salió como un tiro, combinando muy fácil y sitiando la portería del Elche, pero le faltó puntería para haber encarrilado el partido en la primera mitad. Luis Suárez, en dos ocasiones, y Atienza disfrutaron de claras ocasiones, pero Badía hizo honor a su fama en la categoría y conjuró con sus paradas los méritos de un Zaragoza al que le sobra fútbol y le sigue faltando acierto. Pero al final queda la victoria, lo más importante, y también queda el liderato provisional. Y queda el excelente debut de Clemente, un chico de 20 años que se comportó como un veterano de mil batallas. Ahí hay un central de categoría.