Se acabó. El Atlético cayó en San Mamés, sin ser inferior a su rival, y dice adiós a la posibilidad de luchar por la Liga hasta el final. En una semana el equipo de Simeone se quedó sin la pelea por la Champions y también por el título liguero. A la decepcionante derrota en Turín se suma ahora la de Bilbao y la temporada dice prácticamente adiós para un equipo que ya apenas tiene algo por lo que luchar. El club se aseguró hace tiempo estar en la próxima edición de la Liga de Campeones y si acaso ahora puede pelear por ser segundo y acabar por delante de su eterno rival. Una pena que en apenas cinco días el Atlético haya dilapidado un año de trabajo. Las derrotas llegan siempre en el peor momento, pero hay algunas que duelen más y la de San Mamés es de esas porque un triunfo hubiera animado a un equipo se sume ahora en plena depresión.

Errores. El Athletic marcó el 1-0 cuando mejor estaba jugando el Atlético. Me pareció falta a Giménez, como también hubo penalti a Griezmann. La falta al punta francés fue clarísima, pero Jaime Latre no la vio. El Atlético no juega bien, no tiene muchas ocasiones y se encuentra en esta fase donde tampoco los colegiados ayudan mucho. Total, fin a la racha de 13 partidos sin perder ante el Athletic y primera vez que cae en el Nuevo San Mamés, tras cinco victorias y un empate. Además, comete errores casi infantiles. En el primer gol del Athletic Giménez pudo ceder a Oblak y se acabó el problema. Pero arriesgó, perdió el balón y el partido empezó a decidirse a favor del conjunto bilbaíno.

El tridente. Jugaron juntos Morata, Diego Costa y Griezmann y tampoco el Atlético creó un fútbol especialmente fluido. Cierto es que tuvo una fase de dominio en el inicio del segundo tiempo y que el gol estuvo cerca, pero un partido más el Atlético se fue sin marcar. De cara al futuro puede valer aunque en esta ocasión no dio resultado. Total, amargura en los aficionados rojiblancos que se desplazaron a Bilbao. La temporada pasada el Atlético estaba a estas alturas peleando por la Europa League, con ilusión de celebrar algo y ahora ya toca pensar en lo que viene por delante.

El futuro. Llega el parón por selecciones y se hablará del futuro, de los jugadores que pueden salir y saldrán y de los que pueden llegar. No hay para mucho más en una campaña en la que la hinchada ha vuelto a darlo todo, sigue batiendo récords de socios y abonados, en una temporada que todos queríamos que acabara el 1 de junio. Pero a 16 de marzo, dos meses antes de lo previsto, el Atlético logrará su objetivo, estar entre los cuatro primeros y logrará un aprobado muy raspado. Habrá que seguir luchando. No queda otra. Como lo hace Luis Calderón, hombre de fútbol, uno de los entrenadores del Nuevo Boadilla, club de base, que atraviesa por un momento complicado. Saldrás adelante, claro que sí. Sacarás fuerzas de flaqueza, como también lo tiene que hacer el Atleti. Ánimo, Luis. El fútbol de LaLiga para. Al equipo madrileño le vendrá bien. Toca recapacitar y pensar los motivos por los que el equipo se encuentra ahora así. Las razones por las que ha sido la semana del adiós.