¿Habrá visto Xavi el Clásico?

Tengo la suerte de tener un gran amigo en Marruecos que se llama Jalal. Como cualquier aficionado que vive del otro lado del Estrecho está loco por el fútbol español y se declara abiertamente seguidor del Barça. Es un chico inteligente y franco y resulta muy agradable charlar con él sobre este deporte. Ayer mi amigo puso el dedo sobre algo que el resultado contundente a favor de los barcelonistas (y desastroso para los merengues) ocultó en gran parte. Me dijo: "el miércoles por la noche parecía que los culés iban de blanco y los madridistas de azulgrana". Tiene razón Jalal, fue el mundo al revés porque el equipo dirigido por Ernesto Valverde crucificó al Madrid jugando a esperar y a matar a la contra. Una táctica muy alejada de esta filosofía absolutista que el Barça quiso imponer como referencia absoluta de la calidad y de la estética del fútbol. Todo lo que no se acercaba al dogmatismo culé era horrible y despreciable. Aquí me remito a las numerosas palabras de Xavi Hernández.

Pues resulta que las cosas han cambiado. Porque el miércoles el que quiso construir el juego, el que atacó sin parar fue el Real Madrid. No tuvo suerte ni acierto en el remate pero nadie le puede reprochar nada sobre sus intenciones futbolísticas. Insisto, el espantoso resultado lo afeó todo y perturbó el análisis global pero creo que Santiago Solari puede usar muchas cosas del encuentro de Copa del Rey para intentar montar algo interesante esta noche en el Bernabéu. No, el Madrid no parte de la nada, no llega de rodillas a este nuevo duelo.