Pasan los días, el Madrid no ficha y en Valencia hay una inquietud: ¿se lanzará a última hora Florentino a por Rodrigo? He aquí un buen goleador, que ha alcanzado una madurez espléndida, tras un gran arranque y un periodo medio de su carrera discreto. Marcelino le revitalizó en el Valencia y Lopetegui contó con él para la Selección. El Madrid anda corto por arriba: Benzema y después Borja Mayoral. La sobreprotección con que ha contado el francés, ojito derecho de Florentino desde que llegó en 2009, ha ido haciendo que le eliminaran competidores, fueran estos Higuaín, Chicharito, Morata o Mariano.

Ahora que se ha ido Cristiano, el vacío en el ataque se hace patente. El Madrid tiene un buen primer equipo, e incluso una buena delantera, con Bale, Benzema y Asensio, pero está corto de repuestos. Bale, con más facilidad de gol que el propio Benzema, carga con la sospecha de sus lesiones frecuentes. Asensio está por romper aún. Tiene momentos de tanto brillo que permiten esperar lo mejor de él, pero le falta continuidad. Tras ellos están Lucas Vázquez, Borja Mayoral y Vinicius. No cuento a Raúl de Tomás, que está pendiente de cesión. Parece que falte algo más. Quizá no tanto un titularísimo como un repuesto realmente bueno.

Eso pide Lopetegui, y eso sería Rodrigo. Pero su cláusula es de 120 millones de euros. Al Valencia le es difícil soltar a un jugador al Madrid por menos de la cláusula. La afición no lo admite. Para el Madrid, pagar 120 millones por un jugador que Florentino sólo concibe como reserva de Benzema sería un exceso. Y después de haber vendido a Cristiano por cien millones, resultaría francamente ridículo. Pero frente a eso está la creciente inquietud de la afición y la realidad de que el Madrid fue el equipo que menos pisó el centro del área rival en la primera jornada de Liga. Y Benzema chutó una sola vez, y fuera.