La obra del Cholo y el sueño del Niño
Sigue creciendo la obra de Simeone. Fue una final que la marcó el talento. Germain tuvo la suya y nada. Y Griezmann aprovechaba una presión trabajada a Mandanda para reducir y definir con el talento que nos tiene acostumbrados. El segundo tiempo fue de emoción y orgullo, donde los rojiblancos pasaron por encima de los franceses con Koke, Saúl, Gabi y Griezmann superlativos. Lo escribí aquí hace unas semanas en forma de sueño. No estaba ni el Atlético clasificado para la final de la Europa League. Y tuvimos el final soñado con el detallazo de Gabi al darle la copa a Fernando Torres. Esa copa no la levantó El Niño, la levantó un aficionado rojiblanco que desde los 11 años ha vibrado en la grada del Calderón y que lo seguirá haciendo toda la vida con su Atleti en el Metropolitano o donde se tercie. Ahora hay que celebrar esta tercera Europa League como se merece, sabiendo de la dificultad que conlleva ganar algo.
Cholo, qué bonita te está quedando la obra... No olvidar de dónde se viene ni hacer caso a los que la etiqueten de un rango inferior. Tampoco hay que olvidar de dónde se viene y la dificultad que conlleva campeonar en el fútbol de élite. A Neptuno hay que visitarlo como se merece con la inercia del seguir ganando y creciendo porque es una victoria que hace ruido en Europa y demuestra que la era Cholo no es una moda pasajera.