Zidane hace suyo el sufrimiento de Benzema, pero no el de Bale
La sobreprotección. “Benzema está sufriendo”, retumbó en la sala de Prensa de Valdebebas. Zizou contestó ayer sin tapujos al mal momento que está viviendo el delantero francés, presionado por su falta de gol y por el entorno hostil que se está generando a su alrededor. Entre los motivos de su falta de puntería y de su intrascendencia en demasiados momentos hay que subrayar en rojo su incomprensión en todo lo que rodea a su salida de la Selección francesa y su certeza de que el Mundial lo va a tener que ver por televisión. En apenas tres días, queriendo ayudar, Zidane ha hecho dos faenas a su pupilo más querido: la primera, cambiarle por Cristiano Ronaldo en el derbi. Fue como el día y la noche el Madrid en ataque; la segunda, constatar lo que ya era palmario. Lejos de la indulgencia, el Bernabéu le va a exigir aún más si cabe.
Un menos cariño. Las comparaciones suelen ser odiosas. No hay más que constatar la distinta manera de responder del técnico al mal momento de Karim y al del galés. Benzema es uno de sus jugadores bandera y la comprensión a su mal momento, máxima. Bale ha dejado de serlo y sus tres suplencias en los tres últimos partidos de Champions ante PSG y Juve así lo atestiguan. No sería de extrañar volver a ver a la BBC esta noche, pero tengo claro que Zidane luchará, como ya hizo con Keylor Navas, por mantener a Karim en su plantilla, no tanto por Gareth.
CR y el arte del desmarque. Cuando se muestre a los niños el repertorio rematador de Cristiano Ronaldo, hay que enseñar también su impresionante capacidad para desmarcarse, convertida en un arte. Su deslumbrante chilena ante la Juve en su estadio eclipsó su gran movimiento en el primer gol para adelantarse a toda la defensa de la Juve. Frente al Atlético lo volvió a hacer. Amagó a Lucas en el momento justo para ganar el metro que distingue a los delanteros comunes de los de época. No hay otro que maneje el tiempo y el espacio dentro del área como él.
Ganas de Vallejo. Comprobando la madurez de Varane, uno recuerda su primera temporada, con sus complicaciones, su difícil adaptación y sus lesiones. Jesús Vallejo necesita partidos grandes para demostrar la jerarquía que tantas veces demostró en el Zaragoza, en las categorías inferiores de la Selección y, con cuentagotas, en el Real Madrid. El fútbol español está necesitado de centrales importantes y la Juve es una gran piedra de toque para comprobarlo.