Valverde siempre vuelve
El titular no es originalmente mío, lo vi en el comunicado oficial del Movistar Team y me lo he apropiado, porque me parece que describe perfectamente lo que vivimos este jueves en la Volta a la Comunitat Valenciana: ‘Valverde siempre vuelve’. Ya hemos leído otras veces esa misma expresión asociada a deportistas y equipos con pedigrí de campeones. Alejandro Valverde volvió a ganar en su quinto día de competición en la presente temporada, 215 días después de su caída en el Tour de Francia, 276 días después de su última victoria en la Lieja-Bastoña-Lieja de 2017... Ya son 109 triunfos en su dilatado palmarés. Había dudas sobre su rendimiento por la gravedad de su lesión (fractura de rótula) y por su edad (el 25 de abril cumplirá 38 años), pero ya parecen disipidas. Valverde siempre vuelve.
Después de las habituales carreras en Australia y Argentina, la campaña europea había arrancado la pasada semana en la ya clásica Challenge de Mallorca. Estamos en la temporada I después de Alberto Contador, un ciclista que ha acumulado siete grandes vueltas y mucho espectáculo en sus piernas. La expectación en la carrera balear giraba en torno al regreso de Valverde, que ya logró allí un tercero y un cuarto puestos. Al murciano seguramente no le queda mucho en el pelotón, pero aún puede tirar de un ciclismo español que busca referentes. Esa mochila la carga principalmente Mikel Landa, que se estrenará en la Vuelta a Andalucía (14 de febrero). Y entre los más jóvenes, el propio Contador citó hace unos días dos nombres: Enric Mas y Marc Soler. Ellos son los sucesores.