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Sólo Cristiano pudo tumbar al equipo más orgulloso de Europa

El Madrid, en el alambre. El cóctel entre la falta de puntería, la pérdida de control en muchos tramos de partido, un penalti más que dudoso, el infortunio de un autogol de Sergio Ramos en el peor momento y tener un titán enfrente llevaron al equipo de Zidane al límite del abismo. Carvajal y Cristiano, desde la presencia y desde la pegada, repitieron su papel estelar del Allianz. El Bayern hizo honor a ese tremendo orgullo que siempre preconiza y, ni con diez, claudicó. Un equipazo tremendo, con un Robben estelar, al que sólo Cristiano, siempre Cristiano, pudo tumbar.

La grandeza del Bayern. Hay que tener muchísima personalidad para plantarse en el Bernabéu y aceptar sin tapujos un intercambio de golpes. El equipo de Ancelotti llegó muchísimo y tiró poco en el primer tiempo. El Madrid perdonó un carro de contragolpes, con una falta de puntería que recordó el segundo tiempo de Múnich. Tras el descanso llegó el momento crítico de la eliminatoria. Jugar tantos minutos con uno menos y mantenerse de pie tiene un mérito extraordinario. Eso sí, tiene más alcanzar siete semifinales consecutivas, como ha hecho el actual campeón.

El lateral más completo del mundo. En Alemania, tierra de grandes laterales como Kaltz, Briegel o Lahm, Dani Carvajal es un jugador admirado. El niño que puso la primera piedra de Valdebebas hizo su enorme Erasmus futbolístico en el Bayer Leverkusen, fue proclamado mejor lateral de la Bundesliga y parece que los vestigios de aquella experiencia cimentaron al lateral más completo del mundo en estos momentos. Hubo un tiempo que el lateral derecho solía ser el más flojito del equipo del barrio. Es muy difícil erigirse como el jugador más importante de una eliminatoria entre el Real Madrid y el Bayern jugando de lateral derecho.

La Edad de Oro del Atlético. Es de un mérito extraordinario que un equipo como el de Simeone alcance su tercera semifinal en cuatro años. Más allá de los títulos no conseguidos en prórroga o tanda de penaltis en las finales contra el Madrid, ha encontrado la gloria en el camino. Es un grande de Europa, un equipo admirable por su robustez, su saber competir y la jerarquía en todas sus líneas, Godín, Gabi, Koke y Griezmann, los intérpretes de un cuento de fútbol, un relato maravilloso, aunque el final pueda no ser feliz.