Higuaín frente a Dybala y las vergüenzas al aire sin director deportivo
El Calcio. Italia se centra estos días en dos nombres, Higuaín y Dybala, estandartes del Nápoles y la Juventus que se juegan este fin de semana media liga. Dos delanteros de moda que ejemplifican el fracaso en la dirección deportiva del Madrid, si es que ésta existe... Higuaín fue vendido por 40 millones para dejar vía libre a Benzema, único futbolista capaz de hacer saltar de la butaca de un palco a Florentino (en Lyon). El precio en el mercado del Pipita es ahora de 80 millones.
Mascardi. El otro nombre del fin de semana es Dybala (22 años). El argentino fue ofrecido este verano al Madrid por su representante, Gustavo Mascardi, por la misma cantidad que la Juve ha pagado por él: 32 millones más objetivos hasta 40. Él o Morata fueron una petición expresa de Benítez. La dirección deportiva (Florentino) dijo "no". Para qué traer a alguien que hiciera sombra a Benzema cuando se puede fichar a Danilo por 31,5 millones (38 con comisiones, temblará la planta noble del Bernabéu si alguna vez las saca Football Leaks), o 30 en Kovacic. Ambos costaron lo mismo que Dybala, al que ahora la Juve no vendería nunca por menos de 80 kilos.
Zidane. Pero el efecto Zidane ha tapado las graves deficiencias en la gestión deportiva del Madrid. En el horizonte hay una fecha clave, el 17 de este mes. El partido ante el Roma. Primera gran prueba de fuego para Zidane en su debut como entrenador en la Champions para el que hay una buena anécdota. Zizou también debutó como jugador del Madrid en Champions ante el Roma en 2001. Fue tras cumplir una dura sanción de cinco partidos por propinar un cabezazo a un jugador del Hamburgo estando en la Juventus. El Madrid ganó la Novena, con Del Bosque en el banquillo, ante el Leverkusen. Fue con su volea antológica... El Roma, para un debut de Zidane, trae suerte.
Ochaíta. Hace unos días Manolo Redondo, director de gabinete del Madrid, recibió la medalla de bronce del CSD a propuesta de Ana Muñoz "por su lucha contra los ultras". Los mismos ultras que estuvieron tantos años amparados por el club con Florentino en la presidencia (los que cantaron "¡Marca y AS cámara de gas!"). Muchos de ellos siguen en la grada de animación, casi todos de la vieja guardia. Como el líder histórico de los Ultras Sur, Ochaíta. Pero Ochaíta ha tenido que dejar de asistir esta temporada al Bernabéu. Está cumpliendo (tras largos recursos) una sanción de un año de la Comisión Antiviolencia, del propio CSD, por unos hechos violentos sucedidos en un derbi de 2011. Si no, estaría dentro. "Los hay mucho peores que él en la nueva grada", afirman desde dentro del club mientras se asombran por la medalla otorgada por el CSD.