En Honda trabajan por la revancha

Tengo un enorme interés por conocer el desarrollo del proyecto de Honda en su regreso desde 2015 a la Fórmula 1. Se trata de uno de los gigantes de la industria y el deporte del motor que salió escaldado de su última aventura en los grandes premios automovilísticos; a diferencia de sus éxitos en las motos, ninguna de sus dos etapas como constructor ha resultado fructífera, con el agravante de que los títulos de Brawn GP llegaron en 2009 cimentados sobre la base que la marca japonesa había dejado en su retirada. Mi impresión es que si ahora vuelven como proveedores de motores de McLaren es porque necesitan la revancha de un fiasco tan sonado, sin olvidar que este nuevo certamen híbrido se acerca mucho más a sus planteamientos tecnológicos.

Supongo que en Honda habrán echado la vista atrás para comprobar que frente a su mediocridad como equipo (tres victorias y dos cuartos puestos en el campeonato como mejores resultados) contrasta su brillantez como motorista, incluyendo seis títulos asociados primero a Williams (dos) y a la propia McLaren. Así que han elegido la opción más inteligente en su retorno, la de volver a trabajar con una escudería legendaria que pretende reverdecer esos laureles hoy mustios. La combinación de tanta capacidad y ambición puede resultar temible a poco que sus ingenieros acierten... y deberían hacerlo. Si Honda ha asumido semejante desafío es porque confía en su potencial, ya que en ningún caso pueden permitirse un nuevo patinazo.