Recordad: su obsesión es nuestro sueño

Y llegó el día soñado por el Atlético de Madrid y sus seguidores, porque para el Real Madrid es más bien una obsesión que un sueño. Eso nos diferencia.

El Atleti ha hecho una temporada magistral en la que ha sumado miles de nuevos seguidores y, sin duda alguna, eso es lo más importante. Mientras Cristiano se empeña en enseñar, después de marcar, el número de goles que ha metido haciendo gestos rarísimos con las manos, Simeone se enorgullece de los miles de nuevos y jovencísimos seguidores que ve por la calle vestidos con la camiseta del Atleti, mientras el autobús pasea a una plantilla feliz y orgullosa tras conquistar el dificilísimo título de Liga. El Atleti viaja con mucha menos presión a Lisboa. Ya ha triunfado, pase lo que pase. Esa es nuestra mayor baza. En cambio el Madrid juega al borde del abismo. Un mal resultado en la final de la Copa de Europa transformaría toda la temporada en temporadita con una Copa del Rey y un tercer puesto en Liga. Un fracaso para los vendedores de tripletes.

El Atleti ya es el rey del mundo y ha asombrado a Europa por su fortaleza mental jugando con un espectacular concepto de grupo y de equipo y eliminando a Milán, Barcelona y Chelsea. Ni más ni menos. Lisboa será una fiesta para nosotros, perdamos o ganemos. Recordad la final de Copa del Rey contra el Sevilla no hace mucho: el magnífico sabor de boca de la hinchada rojiblanca tras conseguir la Europa League días antes no supuso que los seguidores atléticos se vinieran abajo tras caer derrotados en la final, sino todo lo contrario. Otra lección de la hinchada rojiblanca. Así que ya hemos ganado pase lo que pase.

Esa fortaleza mental de los jugadores y de los seguidores será definitiva para llevarnos el partido y traernos la Copa a Madrid. Que empiecen a vallar Neptuno.