Su estado físico es lo inquietante

Lo inquietante de Bale no es lo que dice Villas-Boas, con el debido respeto, sino lo que arrastra físicamente el galés. Creo que siempre será mejor alinear en el mismo once a Cristiano y a Bale, que solamente a uno. Y también pienso que uno hace mejor al otro y a la inversa. Que formen una pareja letal será cuestión de tiempo y de perfilar sus roles en el equipo. El portugués es un ‘Animal’ del fútbol y el galés está en disposición de serlo. Por donde no paso es por la insinuación de que el nuevo mega fichaje se oscurece cuando coincide con Cristiano en el terreno de juego. La realidad es otra y algo más preocupante: Bale no ha alcanzado su punto de forma óptimo debido a continuos infortunios físicos, y es la razón de un rendimiento hasta hoy intermitente.

Lo último que sabemos de Bale es que por “un golpe en el gemelo” ha causado baja en tres partidos oficiales del Madrid, el tercero de ellos de campanillas, en Mestalla. No hay por qué dudar de la versión médica oficial, por supuesto, pero hemos de reconocer que la suerte no acompaña al galés cuando hablamos de salud. Desde que aterrizó en el Bernabéu sólo ha podido disputar la mitad de los minutos posibles, para mayor decepción del madridismo, que con buen criterio esperaba ilusionado la aportación de Bale al proyecto Ancelotti. De momento ha dejado chispazos de su soberbia calidad, con o sin Cristiano en el campo, y lo importante será que el galés retorne al trabajo después de Navidad sin lastre físico. Esta es la verdadera cuestión a valorar.