ASÍ LOS VEMOS: Cincinnati Bengals (AFC Norte)

Mariano Tovar

Uno de los debates recurrentes en offseason gira en torno a cuál es la división más complicada de la NFL. Las primeras que nos vienen a la cabeza suelen ser la NFC Este, por la tremenda rivalidad histórica entre Redskins (me encanta escribir este nombre), Cowboys, Giants y Eagles, o la NFC norte, donde Packers, Vikings, Bears y Lions también acumulan deudas pendientes y agravios de sangre. Pero si nos ceñimos a los números de la pasada temporada, las dos más duras fueron la NFC sur, donde cada equipo gano y perdió tres duelos divisionales, y la AFC norte, donde incluso los Browns (que tenían pegada e ingenuidad a partes iguales) se llevaron puestos a Steelers y Bengals en su feudo de Cleveland.

La sensación que nos quedó fue que los Steelers hicieron una mala temporada, pero la realidad es que estuvieron en la pelea hasta el último día y los Bengals consiguieron su clasificación con un tremendo sprint final en el que vencieron a Pittsburgh y Baltimore. Más allá de los números, los de Cincinnati fueron siempre un equipo rocoso y difícil de ganar... aunque en su contra se esgrimió un calendario en el que abundaban rivales bastante blanditos. Este año tienen un primer mes infernal con Bears, Steelers, Packers, Browns y Patriots en sus cinco primeros partidos. Si consiguen salir del atolladero con tres o más victorias, todas las miradas se centrarán en Cincinnati.

Tal vez haya llegado el momento de dejar de criticar a Marvin Lewis, su entrenador principal, y valorar en su justa medida cómo ha sido capaz de darle la vuelta a unos Bengals que, hasta hace muy poco, eran el refugio de todos los balas perdidas de la NFL. Es verdad que la metamorfosis le ha costado diez años, pero los Bengals encarnan ahora mismo todo lo que se le exige a un equipo de la AFC Norte: dureza defensiva, intensidad y lucha hasta el final.

En la agencia libre pasaron desapercibidos salvo por el fichaje de James Harrison. Parecía obligado que reforzaran el grupo de linebackers, claramente lo peor de su defensa, pero no parece que un Harrison con 35 años, acostumbrado a jugar en una 3-4, y que en 2012 fue una sombra de si mismo, pueda ser el revulsivo que mejore la formación, aunque si miramos lo que tienen por delante en la línea, tal vez se explique que se tomen con tanta calma el problema, que quizá haya sido mejor resuelto en el draft con la elección de Sean Porter en 4ª ronda, un OLB con una pinta estupenda.

Los Bengals siguen sacando petróleo de la venta de Palmer a los Raiders y han acumulado nada menos que diez elecciones en el draft. Viendo las dos primeras: Tyler Eifert (TE) en primera, y Giovani Bernard (RB) en segunda, parece claro que la auténtica preocupación del staff está en el ataque por dos motivos: las dudas que provocó Dalton en 2012 y la falta de un backfield poderoso en una división en la que es indispensable.

¿Sufrió Andy Dalton la maldición del sophomore? Lo números dicen que no, pero su presencia en el campo no tuvo en 2012 el efecto del año anterior, en el que el debutante incluso fue elegido para jugar la Pro Bowl. Dalton perdió el desparpajo del primer año, aunque sí se notó la presencia y el saber estar. Entre los aficionados hay cierto regusto de decepción, pero tal vez se deba a que dá la sensación de que nunca llegará a ser la gran estrella que pareció incoarse en su temporada de rookie... y a su terrible actuación en Wild Card por segundo año consecutivo. A Dalton le falta algo de brazo y el fichaje de un TE con la primera ronda, en un equipo que ya tiene a Jermaine Gresham en esa posición (que el año pasado acumuló 737 yardas de recepción) y a AJ Green como receptor principal, parece sorprendente. La única explicación es que Marvin Lewis jugará habitualmente con doble TE para acercar los lanzamientos de Dalton y beneficiar su gran virtud, que es la facilidad para leer defensas. Entiendo que eso frustre a una afición que sueña con un QB que lance permanentemente pases kilométricos a una bestia como AJ Green, pero no se puede tener todo y lo inteligente es cuadrar el puzzle con las piezas que se tienen.

A mí me gusta mucho Dalton. Me parece un jugador inteligente y muy valiente, sin ser temerario, pero creo que es un QB que debe ser mimado por el sistema. Si alguien le obliga a ser demasiado vertical, pese a tener como objetivo a AJ Green, se equivocará. Dalton es un gran movedor de cadenas pero con él los Bengals difícilmente serán un equipo que acumule puntos. El juego con él exige paciencia, control del reloj y mucho trabajo y sangre fría desde la banda. Y mirad, como he dicho antes, me parece un tipo muy inteligente que, según vaya ganado experiencia, se puede convertir en uno de esos quarterbacks que nunca aparecen en el top ten de los rankings, pero que sí saben convertir a un equipo en ganador. Un nuevo Hasselbeck.

Y claro, un QB como él necesita detrás un backfield potente y Green-Ellis era claramente insuficiente. Por eso eligieron a Giovani Bernard, que en algunos mock draft incluso aparecía como la posible primera elección del equipo y les llegó en segunda, para alborozo del respetable bengalí, que se golpeaba la cabeza contra la pared del salón tras la elección de un TE en 1ª. Hay muchas dudas sobre su auténtico potencial, pero para ellos puede ser perfecto. Tiene talento, muy buenas manos para salir al pase y potencia para crear peligro en terceros downs. Si Bernard funciona desde el primer día, creo que estos Bengals no serán solamente un equipo de postemporada como los últimos años, sino un auténtico aspirante dentro de una AFC en la que los gallos dominantes de la última década parecen casi amortizados.

Y ahora, la valoración línea por línea. La nota será sobre 5. (5=sobresaliente. 4=notable. 3=bien. 2=suficiente. 1=insuficiente. 0=Muy deficiente).

ATAQUE

Quarterback 3. Como he dicho antes, me gusta Dalton. Por encima de cualquier otro talento, me encantan los QBs inteligentes y creo que Dalton lo es. Eso sí, no hay que pedirle un pilotaje temerario. Si le dejan mover el balón sin agobios puede ser un director de orquesta fantástico, pero no es el tipo ideal para conducir una remontada contra el reloj pese a la ayuda de AJ Green. Ficharon a Skelton como segundo. Que Dios guarde la salud de Dalton.

Backfield 2. Green-Ellis cumplió con creces. Más de 1000 yardas y 3,9 por intento. Pero los tristes seis touchdowns en toda la temporada confirman que no es un número 1. Pujaré por Bernard en mi Fantasy, porque creo que será el titular desde el primer día y que además tiene el perfil perfecto para complementar a Dalton. Por si acaso, eligieron a Rex Burkhead con una sexta ronda que quizá debieron invertir en otras necesidades. Por ahora, y hasta ver como sale el experimento, les dejo con un suficiente.

Receptores 4. Señores, prepárense para disfrutar de un festival de doble TE con Gresham y Eifert en el campo. Y por si fuera poco, AJ Green, casi un clon de Megatrón, seguirá siendo una de las amenazas profundas más letales de la NFL. Andrew Hawkins, un todoterreno que se entiende a la perfección con Dalton, y el prometedor Sanu, que se lesionó en su primera temporada cuando estaba empezando a rendir de verdad, completan uno de los grupos más completos de la competición.

Línea 4. El drama Andre Smith terminó bien. El tackle parecía perdido, lo que hubiera sido un grave problema para esta línea, pero acabó firmando un contrato de 3 años para que toda la organización respirara aliviada. Smith forma con Andrew Whitworth, el izquierdo, una de las mejores parejas de tackles ofensivos de la NFL. Wharton y Zeitler son dos grandes guards y solo la posición de center parece coja. Kyle Cook, Trevor Robinson y TJ Johnson (elegido en séptima ronda) lucharán por el puesto. En el draft buscaron profundidad con dos elecciones medias y bajas más.

DEFENSA

Línea 5. Una línea salvaje que sobrepasa de sobra el alto listón de la AFC Norte. Los Bengals siguen siendo fieles a su 4-3 en el reino de las 3-4 y el motivo fundamental es que Dunlap, Peko, Atkins y Michael Johnson sumaron 32 sacks en 2012. Con un Geno Atkins que ha elevado a la categoría de arte el trabajo de defensive tackle y un Johnson que aprovecha a la perfección el pánico que provoca el salvaje que está junto a su hombro izquierdo. Peko es infranqueable por el centro y a Dunlap, otro estupendo end que el año pasado quizá no tuvo todo el protagonismo que merecía, le han metido presión eligiendo en segunda ronda del draft a Margus Hunt para competir por la posición.

Linebackers 2. El año pasado los proyectados como titulares eran Lawson, Maualuga y Howard. El primero se ha ido a los Bills, Howard es agente libre tras perderse casi toda la temporada por la rotura del ligamento anterior cruzado y Maualuga sigue, lo que no está muy claro que sea bueno o malo, porque sus números de 2012 no ocultan que está siendo una decepción tras las expectativas que provocó cuando fue elegido en segunda ronda de 2009. Harrison está mayor y no tengo muy claro que su aportación anímica sea necesaria y positiva. El no drafteado Vontaze Burfict, que tuvo una primera temporada esperanzadora, deberá confirmar las sensaciones. En 4ª ronda eligieron a Sean Porter y estoy seguro de que terminará siendo titular en un lado o en otro de una formación llena de incógnitas.

Secundaria 3. Todos los ojos están puestos en Dre Kirkpatrick, la flamante elección de primera ronda de 2012 que prácticamente quedó inédito por culpa de la lesiones. Incluso ahora es duda para el inicio de temporada porque una de sus rodillas sigue dando guerra. Justo lo contrario sucedió con Leon Hall, que jugó una temporada estupenda, completamente recuperado de su complicada lesión en el tendón de Aquiles. Si Kirkpatrick continúa su particular Via Crucis, Terence Newman y Pacman Jones, que teóricamente debían competir por el nickel, tendrán tanto protagonismo como el año pasado, cuando fueron una solución de circunstancias que funcionó a las mil maravillas. Reggie Nelson es un buen free, pero la posición de strong no está tan clara. Taylor Mays es muy poca cosa y en tercera ronda eligieron a Shawn Williams para que sea el titular cuanto antes.

PRONÓSTICO

Los Bengals tienen una gran defensa y han reforzado el ataque con las armas necesarias para potenciar las virtudes de Dalton. Si revisamos todo el grupo no hay duda de que es sólido, completo, con profundidad en casi todas las posiciones y sin grandes debilidades. Creo que, pese a todo, ellos son el equipo a batir en su división (y decir eso cuando el actual campeón forma parte de ella, es mucho), pero si quieren tener éxito en postemporada necesitan la alegría ofensiva que no exhibieron en los dos últimos años. Este equipo necesita pegada. Hasta ahora han sido como esos boxeadores que saben bailar sobre el ring, y encuentran con facilidad huecos para golpear a sus rivales, pero son incapaces de imprimir la potencia necesaria para provocar un KO. Creo que ya tienen todos los ingredientes para ello. Ahora solo hace falta que Marvin Lewis sepa mezclarlos. En realidad, el entrenador ya hizo lo más difícil sacándoles 'de la calle'. Si encuentra la fórmula, aspirarán al título.

mtovarnfl@yahoo.es / twitter: @mtovarnfl

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