Rafinha decanta el Clásico de juveniles para el Barça (3-1)

El Barça se proclamó campeón de España juvenil tras derrotar al Madrid en una final que era mucho más que eso, pues se medían dos escuelas, dos ideas, dos filosofías. Ganó la culé, para prolongar la sonrisa de sus aficionados en este periplo de Clásicos, pero sobre todo dejó para el futuro un nombre propio que ya sonaba y que a partir de ahora habrá que subrayar. Se trata de Rafa Alcántara, Rafinha, el hijo pequeño de Mazinho y hermano menor de Thiago, que con su calidad decantó un partido más desequilibrado de lo que parecía en principio. Actuando como falso delantero centro, al estilo Messi, el zurdo dejó prácticamente sentenciado el choque en apenas 20 minutos, los que tardó en empujar el primer tanto y fabricarse el segundo con un buen recorte.

Del Madrid no hubo mayores noticias, sobre todo porque fue incapaz de asimilar el golpe psicológico que le supusieron esos dos tempraneros goles. De hecho, el Barça pudo poner más tierra de por medio mediante un penalti que falló Espinosa, aunque tuvo que ser de nuevo Rafinha, en el segundo tiempo, el que brindase la sentencia a Ernesto con una gran acción individual. Ahí concluyó una fi nal descafeinada, quizá por el mayor desgaste físico madridista después de jugar tres partidos en cuatro días.

3. Barcelona: Carlos; Campabadal, Sergi Gómez, Ayala; Balliu, Maso, Gustavo, Espinosa (Dongou, m.88); Ernesto (Cristian, m.69), Rafinha (Pol Calvet, m.80) y Delulofeu.

1. Real Madrid: Pacheco; Ález Díaz (Parla m.80), Iván Sáez (Juanfran, m.73) , Derik, Payá; Kamal, Omar, Barril (Belima, m.46), Aguza; Jesé y Sobrino (Fran Sol, m.58).


Goles: 1-0, m.8: Rafinha, 2-0 m.24: Rafinha, 3-0, m.62: Ernesto, 3-1, m. 91: Sol.

Árbitro: Munuero Montero, del Colegio Andaluz. Amonestó a Aguza, Sobrino, Espinosa y Payá. Roja a Gustavo (91').

Incidencias: Ciudad de Lepe. 1.000 espectadores.