Tanto lío para volver a Adebayor
Mourinho va a tener razón. Hace dos semanas los medios hacíamos patente el interés del portugués por Adebayor. Era el nombre que tenía subrayado en rojo en su agenda y, sin ningún género de dudas, lo mejor que ofrecía el mercado. El técnico quería y ya tiene su 9. Se filtró desde el club que Adebayor no respondía al perfil, que era un jugador problemático, que era capaz de cruzar el campo para festejar un gol en la cara de la afición rival. "No llegarán ni Adebayores ni Kloses", decía una voz del club a este diario. Luego empezó lo de Van Nistelrooy, un jugador al que se regaló y por el que se hubiese pagado dos millones y un amistoso.
El enfado de Mourinho, en este tiempo, ha ido in crescendo. Ha clamado por el sustituto de Higuaín pública y privadamente. Ha escenificado su no relación con Valdano hasta las últimas consecuencias (el director general ya ni viaja con la expedición). El técnico llegó a decirle en el Calderón: "Tú dices que tienes cero problemas conmigo. Pues yo tengo muchos contigo".
Después de varios incendios innecesarios, el Madrid se trae a Adebayor. ¿No hubiera sido más fácil cerrarlo hace dos semanas? Mou estaría bastante más tranquilo, el togolés llevaría quince días adaptándose y el Madrid no parecería un disparate.