Canales, el culpable y la solución

Es una contradicción, pero también una realidad. La exhibición de Canales le aleja más del Racing y pone contra las cuerdas a Pernía. No es para menos. Aunque no se lo crean, la perla podría firmar hoy con cualquiera de los grandes que suspiran por él ya que, aunque su progresión se veía venir, el presi no ha sido capaz de renovarle aún. Y si lo logra, deberá pagarle el cuádruple de lo que pudo darle hace meses cuando su padre y agente esperaba una oferta para firmar.

Pernía dijo que nadie le hacía la agenda y puede pagar su prepotencia. Porque si Canales se va gratis sería una mala broma para las arcas del club y una pesadilla para Lendoiro (tiene el 50% de beneficio de su traspaso). El 28 de diciembre, Pernía le hizo una propuesta, presionado, por cuatro años, y ahora el que no tiene prisa para responder es Canales, pues se revaloriza día a día. Me da que sólo Portugal podría convencerle de que renueve, para que luego el Madrid lo compre a un precio asequible y acordado, y lo deje cedido en Santander como hizo con Garay. Ésa sería la jugada maestra y la única salvación para la reputación de Pernía.