Ha llegado la hora de cerrar filas

Estamos en un momento de excepción y tenemos la obligación de comportarnos de acuerdo con ello. En tiempos de cólera, la solidaridad es vital. Hemos elegido por cuatro años más una junta directiva que ha cumplido todas sus promesas que puede controlar, pues las supeditadas al azar o al juego no son imputables, y durante ese periodo tenemos la obligación de confiar en ellos salvo incumplimientos. Los socios y seguidores no somos tontos y todos tenemos nuestra capacidad de análisis y de opinión, pero en estos momentos eso debe quedar relegado y sustituido por un apoyo incondicional a nuestro equipo: no podemos seguir facilitando excepcionales portadas a medios periféricos hostiles que siguen regocijándose de nuestras adversidades...

La historia del Real Madrid, nuestra historia, no se ha forjado con concesiones a las contrariedades sino a la superación. Ha llegado la hora de cerrar filas y de que todos (afición e institución) unamos nuestras fuerzas y nuestros sentimientos de forma incondicional. Somos el Real Madrid y esta noche, ante un adversario tan complicado como Osasuna, estamos todos a su lado y, pase lo que pase, lo arreglaremos en familia, como siempre ha sido. Hoy, por convicción y por obligación, tenemos que cerrar filas unánimemente en torno a nuestro equipo y nuestro club.