El volver a empezar de ‘Martinator’
Tras la caída de Indonesia el español llega a Australia a 18 puntos de Bagnaia con 185 puntos en juego y a una pista en la que el año pasado ganó Rins con Márquez segundo.
El sobrenombre de Jorge Martín es Martinator desde que su padre se inventó un guante articulado en Tailandia 2018, inspirado en uno de Ueda de los 90, para que su chaval pudiera seguir peleando por el título de Moto3, que se acabó llevando en Malasia. Ese alias está claramente ligado al mundo del cine, a la saga ‘Terminator’ concretamente, y está por llegar aún la entrega titulada ‘El juicio final’, muy pronto en las mejores salas de MotoGP, pero la situación actual del madrileño da para recurrir a un título muy especial del cine español, el de ‘Volver a empezar’.
La primera película española oscarizada de la historia, obra del fenomenal y completo José Luis Garci, también da título a la historia actual del madrileño de San Sebastián de los Reyes, porque le toca empezar de nuevo otra remontada con la que dar caza a Francesco Bagnaia. La recuperación parece ahora más fáctible que en el capítulo anterior, porque son 18 puntos los que debe recortar, 48 menos que los 66 que llegó a tener de desventaja tras el esprint de Montmeló, y que volteó con un +7 para él tras el esprint de Mandalika.
El del Prima Pramac le restó puntos consecutivamente al líder y campeón en Cataluña, San Marino, India, Japón y el esprint de Indonesia, llegando el cambio de tendencia a favor de Pecco en la carrera larga de Mandalika, la del domingo pasado. En ella, Jorge se fue al suelo en la puñetera vuelta 12+1, cuando lideraba con tres segundos de ventaja sobre Maverick y con Pecco tercero. Era una situación perfecta que le disparaba al frente de la general con +16 puntos, pero todo se fue al traste al perder la rueda delantera en la curva 11. Contó después con calma y ya recuperado moralmente el bueno de Martín que se había ido un pelín largo en el viraje anterior y eso le había hecho ensuciar algo la rueda, para perderla en el posterior viraje. Un mazazo inesperado del que ha demostrar que está recuperado desde su primera salida a pista en Phillip Island.
El de Australia es un circuito que gusta mucho a los pilotos valientes, y aquí hay unos cuantos de esos, y en el que el año pasado se dio un resultado que es imposible de ver este fin de semana. Es así porque ganó Rins, con una Suzuki que ya no está sobre la pista y sin arrastrar una fractura de tibia y peroné que en Indonesia le llevó a acabar la carrera “hecho polvo, el doble de hecho polvo que en el esptrint”. Aquel día Márquez terminó segundo, Bagnaia tercero y Martín sólo pudo ser séptimo, un resultado que de nada le valdría ahora.
En cuanto a las otras categorías, Acosta puede salir de Australia con su primera bola de título en Moto2 para Tailandia, porque llega aquí con 65 puntos de ventaja sobre Arbolino, con 125 en juego. Y en Moto3 la pelea sigue abierta entre cuatro pilotos, porque Masiá lidera con 16 puntos de ventaja sobre Sasaki, 17 sobre Holgado y 29 sobre Alonso, que pese a ser un novato hay que contar con él como volvió a demostrar en Indonesia, con un peleado segundo por detrás de Moreira y por delante de Muñoz.