"Nunca debimos fichar a Rossi"
Razlan Razali, team principal del equipo satélite de Yamaha, se arrepiente de haber roto su filosofía de jóvenes talentos para alinear con ellos al italiano.
Simplemente fue casualidad que Petronas debutase en MotoGP con una alineación de novatos formada por Franco Morbidelli y Fabio Quartararo. El no de un Jorge Lorenzo, que ponía rumbo a Honda, unido al de un Dani Pedrosa que colgaría el casco a finales de 2018, propició que la estructura malaya se embarcase en la aventura de la categoría reina con dos pilotos que necesitaban de mucha fe, hasta que se vio de lo que eran capaces sobre el asfalto. La explosión del francés fue inmediata, de hecho el vigente campeón fue capaz de firmar hasta siete podios y algún que otro duelo frente al inquebrantable Marc Márquez, y esa temporada solo fue un pequeño aperitivo de lo que podía venir tan solo un año después.
Yamaha brilló en un atípico 2020, que se vivió tan extraño fuera como dentro de la pista. La M1 funcionaba… pero con el equipo satélite moviendo la batuta y firmando los buenos resultados de la fábrica japonesa. Quartararo y Morbidelli sumaron un total de seis triunfos, repartidos en tres para cada uno, el italiano terminó siendo subcampeón y aunque Fabio sucumbió en la presión para frenar en seco su progresión, actuó con la suficiente contundencia como para convencer a las altas esferas de Yamaha de que merecía un asiento en la estructura oficial. Tan solo se trataba de una joven promesa, pero demostró estar a la altura de los mejores de la parrilla.
Petronas sirvió de cantera para la estructura de Lin Jarvis y aunque seguir apostando por los nuevos talentos hubiese sido el movimiento natural para el equipo malayo, el hecho de que Valentino Rossi se quedase sin asiento tras el ascenso de Quartararo cambió los planes. Aunque no fue por presión de la cúpula oficial como reconoce Razlan Razali, team manager de la estructura satélite de Yamaha, en Speedweek: "Se suponía que estábamos bajo presión de Yamaha, pero no existió tal presión". ¿Por qué apostar por el italiano entonces? Un podio tuvo la culpa: "Era escéptico, hasta que Valentino fue tercero en junto a Fabio y Maverick en el segundo GP de Jerez de 2020. Cuando estaba de pie en el podio, pensaba: 'al vez este tipo pueda hacerlo".
Una decisión equivocada
La tercera posición de Valentino unida a la propuesta de Yamaha, que ofreció a Petronas trato y moto de piloto oficial si el italiano llegaba a sus filas, fueron el detonante de un fichaje que se valoró de forma diferente cuando el nueve veces campeón colgó el casco. "Para ser sinceros, nunca debimos fichar a Rossi", lamentó un Razali, que ni siquiera debió esperar al que ha sido el año menos competitivo de El Doctor en el Mundial para saber que ese contrato había sido equivocado: "Después de eso (el podio en Jerez), los resultados resultaron ser malos. Pero para entonces ya se había tomado la decisión de fichar a Valentino".
En esta ocasión Razali está convencido de que fue Rossi quien se sometió a demasiada presión: "Creo que Valentino se puso bajo presión. Los pilotos jóvenes son mucho más rápidos. Valentino marcó mejores tiempos por vuelta que en el pasado. Pero eso no fue suficiente. Quería tener éxito, su corazón y su mente estaban preparados para ello, pero el cuerpo no lo aceptó". Y tras un 2021 decepcionante donde al rendimiento del italiano se le unió la lesión de Morbidelli, ahora miran con optimismo a un 2022 en el que han decidido apostar por la experiencia de Dovizioso y el factor sorpresa junto al 'rookie' Darryn Binder.