Mir: "Hubiera sido mucho más difícil con Márquez"

Joan Mir pasó anoche por los micrófonos de El Larguero, de la Cadena SER, en calidad de ganador del GP de Europa de MotoGP y, sobre todo, como el líder de la categoría propietario de bola de título este domingo ya en el GP de Valencia. Subir al podio, haga lo que hagan Quartararo o Rins, segundos en la general a 37 puntos, le permitiría coquistar la corona con sólo 23 años y en su segundo año en la clase reina. Pese a la gesta, conserva la calma a pocas horas del que puede ser el día de su vida.

-23 años, segunda temporada en MotoGP y este año puede ser campeón del mundo…

-¡Quién lo hubiera dicho!

-¿Está nervioso? Diga la verdad.

-No, ahora nada. Ahora estoy en el sofá tranquilo. Vamos, estoy más tranquilo que tú. (Risas).

-Ahora está tranquilo, pero en la carrera, ¿saldrá a mirar de reojo lo que hagan Quartararo y Rins o va a salir a ganar y que sea lo que Dios quiera?

-Desde luego que tenemos que ir mirando cómo van nuestros rivales directos, esto está claro, pero creo que voy a intentar hacer un fin de semana más. Si voy a intentar estar donde solemos estar siempre, se nos hará la cosa más fácil que si tenemos que estar pendientes de los demás, porque algo siempre puede pasar. Creo que tenemos que ir a la nuestra.

-Es piloto de Suzuki y está en su segundo año. Si le dicen al empezar el año que iba a pasar esto pensaría que le estaban tomando el pelo, ¿no?

-Sí, sí, sí. Desde luego. Me esperaba estar luchando por podios y victorias a final de temporada, pero no luchando por un título en mi segundo año. El proyecto con Suzuki es más a largo plazo y no esperábamos estar luchando por un Mundial ahora, en el segundo año.

-Complete esta frase: si gano el Mundial de MotoGP… ¿Qué hace?

-(Risas). No lo sé. No me gusta mucho hacer este tipo de cosas. Pero si gano hago lo que me digas.

-Muchos dicen que se rapan al cero, que se tiñen el pelo de amarillo, que se tatúan Mela Chércoles con un corazón…

-Uff, eso es demasiado, es demasiado. Para eso tendría que ganar diez títulos. (Risas).

-Joan, no haga caso a Manu con eso del tatuaje, pero sí diga cuánto de importante fue ganar el pasado domingo, más allá incluso de tapar bocas a aquellos que decían que lideraba, pero no había ganado…

-Mucho, mucho. No por el qué dira de la gente sino más que nada para mí. Claro está que la gente podía opinar que ganar un título sin ganar carreras no es merecido, aunque yo no lo compartía, pero sí es verdad que me he quitado una espina clavada y ahora mismo sí que me siento un real candidato al título. Si por lo que sea lo ganáramos, sentiría dentro de mí que es muy merecido.

-De lo que se trata es de ser el más constante, ¿no?

-Sí, y más este año con el tema de los neumáticos, que están haciendo que cueste más ser constante y haya muchas sorpresas. Y no sólo eso, el hecho de correr con tanto frío hace que las sensaciones no sean las mejores y que vayamos un poquito al límite. A veces cuesta un poco más encontrar las sensaciones con este tipo de temperaturas. También hace que muchos pilotos no sean lo rápidos que se espera de ellos y es un poco por este tema.

-No está Márquez este año y ya se ha confirmado que no estará hasta 2021. ¿Con él hubiera sido posible?

-No lo sé y nunca lo sabremos. Yo tengo una admiración profunda hacia Márquez porque es el que ha estado dominando la categoría los últimos años, es el claro favorito y es el que ha demostrado todo lo que ha demostrado en esta categoría. Creo que hubiéramos estado luchando con él, seguro. No sé si le hubiéramos ganado, porque no lo sé, pero seguro que hubiera sido, si esto sale, porque todavía no ha salido, hubiera sido mucho más difícil, seguro.

-¿En qué se parece este martes al del martes de 2017 previo a la carrera de Australia en la que se coronó campeón de Moto3? ¿Cambia mucho ahora la película por ser MotoGP?

-No, no cambia la película porque para mí el título de Moto3 valía lo mismo que éste de MotoGP. Yo le daba el mismo valor. Cambia en que ya he vivido una vez lo que es luchar por un título y estoy bastante más tranquilo que ese martes de hace tres años. Creo que lo estoy llevando bastante mejor que ese año.

-¿Quién es el piloto con más talento de de la nueva generación?

-Yo no me tengo que contar, ¿no?

-A usted ya le contamos nosotros. (Risas).

-Vale. Pues creo que mi compañero de equipo (Rins) tiene bastante talento. Creo que Quartararo es también un tío con muchísimo talento, seguramente que más que el primero que he nombrado, pero no sólo es el talento en esta categoría. Hay otros muchos factores. Tienes talento y vas rápido, lo que está bien, pero en las carreras salimos todos juntos y no es a contrarreloj… No sólo es el talento.

-Sin tintes políticos, porque no nos gusta que mezclar política y deporte, ¿tiene intención de volver a sacar la bandera de España si es campeón, como ya hizo en 2017 o el domingo pasado, y qué le ha llevado a recuperar esta tradición que antes era tan clásica y había desaparecido últimamente?

-Cuando cojo la bandera de España, sinceramente, no lo pienso. Simplemente veo una bandera ahí, siento que es mi bandera, y la cojo. No pienso en nada más, ni en política ni en nada. Simplemente es algo en lo que me siento identificado. Veo la bandera y la cojo. Sí que es verdad que hemos visto últimamente que hay muchos pilotos que no lo hacen, y respeto profundamente todo. No quiere decir tampoco que yo la vaya a coger todas las veces, simplemente cuando me apetezca.

-Ojalá que vuelva a hacer sonar el himno.

-Claro que sí. Lucharemos.