"La F1 no es justa, es como si Federer saliera a Roland Garros con una pala de ping pong"
Romain Grosjean, piloto de Haas, es muy gráfico al analizar sus opciones en el campeonato: "¿Realmente esto es un deporte? No estoy tan seguro".
Romain Grosjean inicia su décima temporada en F1, la que puede ser la última ya que no tiene contrato, con Haas y pese a sus diez victorias en 164 grandes premios los resultados del francés nacido en Suiza, que fue campeón de GP2, no han terminado de ser lo esperado. Ahora hace balance, en declaraciones recogidas por 'motorsport.com', antes del GP de Australia que da comienzo al certamen y no esconde su frustración por no lograr la victoria y, quizá, por decir adiós al 'Gran Circo': "Tuve suerte de subir diez veces en el podio. Debería haber ganado dos grandes premios, pero las cosas no estuvieron de mi parte. Y sí, podría pasar que no ganase un gran premio. Daré el máximo para tener algunas opciones en el futuro, hay muchos pilotos sin contrato a finales de año y podría haber también otros que se retiren. La retirada creo que es una decisión que, para mí, llegará bastante pronto. Si a mitad de año veo que no tengo pasión por esto, que no quiero seguir viajando por el mundo lejos de mi familia, entonces me iré".
El piloto de 33 años, de paso, atiza al propio campeonato poniendo en duda la catalogación habitual con un ejemplo muy gráfico: "Creo que a la Fórmula 1 le llamamos deporte, pero ¿realmente es un deporte? No estoy tan seguro. Es un espectáculo, pero un deporte se supone que es justo, y la F1 no lo es. Es muy exigente físicamente pilotar un monoplaza de F1, es duro e intenso, es muchísimo esfuerzo por parte de todo el mundo, pero es como pedirle a Roger Federer que salga a jugar con una pala de ping pong en Roland Garros. No tendría ni media opción".