Michelisz se proclama campeón en el caos malayo
El húngaro de Hyundai salió vencedor de tres mangas locas. Azcona , que acaba 6º en su debut en la Copa del Mundo, tocó a Guerrieri y finiquitó sus opciones.
“Cuando no suceden las cosas como uno quiere, seguro que se aprende. Hoy aprendimos algo, es parte de la vida, es solo un deporte”, aseguraba Esteban Guerrieri tras perder el título del WTCR tras un toque con Mikel Azcona. Esa acción enterró definitivamente sus opciones y certificó el éxito para el húngaro Michelisz. Ese fue el final de una intensa jornada de carreras en Malasia donde ocurrió de todo... La Copa del Mundo de Turismos llegaba a la cita final con un emocionante duelo a cuatro, pero pocos podían presagiar todo lo que pasaría.
Por partes. La primera carrera de Sepang fue la más normal y eso que la pista estaba realmente complicada con zonas húmedas y secas a lo largo del circuito. Michelisz, que salía en la pole, se llevó el triunfo y dejó el certamen casi visto para sentencia pese a la exhibición de Guerrieri, al volante del Honda Civic, que realizó una prodigiosa remontada desde el noveno puesto al cuarto. Azcona tuvo problemas de neumáticos al final y sólo pudo ser 17º.
El caos llegó en la segunda manga. Agua, impactos, un coche en llamas, adelantamientos por todos lados, bandera roja durante una hora... y Michelisz fuera de carrera. La victoria de Guerrieri, secundado en el podio por un fantástico Azcona, le daba un nuevo relanzamiento a la lucha por el Mundial aunque el húngaro lo seguía teniendo muy bien ya que salía en la pole y mantenía diez puntos respecto al argentino, que salía segundo. Para la tercera carrera, las cuentas eran claras: Guerrieri necesitaba ganar y que Michelisz no subiera al podio. La lluvia regresó para dar más emoción... y el resto de la incertidumbre se encargó de ponerla Guerrieri, Azcona y el sueco Kristofferson que adelantaban al húngaro y le dejaban provisionalmente sin título en la primera vuelta.
Un problema en el coche de Farfus hacía salir al Safety Car y dejó todo por dilucidarse en las diez vueltas finales del campeonato. La reanudación fue supersónica y todo sucedió en pocos instantes. Azcona pasó a Guerrieri que le devolvió el adelantamiento. Azcona volvió a colocarse primero y Kristofferson también adelantó a Guerrieri y al propio Azcona... cuya batalla con el argentino acabó en un toque que hizo que Guerrieri se fuera largo, ensuciara el radiador y perdiera posiciones. Adiós a la batalla por el título que ya fue a parar de forma definitiva a Michelisz. Kristofferson se llevó el triunfo y Azcona logró otro increíble segundo, aunque posteriormente fue sancionado con 30 segundos por la acción con Guerrieri, y acaba sexto en la general definitiva en su temporada de debut.