Masiá: "Me he tatuado la primera pole y victoria"

El GP de Argentina de Moto3 sirvió para que Jaume Masiá estrenara a sus 18 años su casillero de victorias y de poles mundialistas. A su vuelta a casa, lo celebró haciéndose un tatuaje en el bíceps de su brazo izquierdo que le recordará por siempre aquel hito.

-El palmarés, con la victoria de Argentina, no es el único cambio que ha experimentado en su llegada a Austin.

-(Sonríe). Es verdad. Me he hecho un tatuaje en el brazo izquierdo que es un pequeño recuerdo. Llevaba mucho tiempo queriéndomelo hacer, pero necesitaba un motivo y ya lo tengo.

-¿Qué es?

-El reloj es un crono de los de antes, el típico cronómetro de atletismo, que representa la primera pole. Luego está marcado el tiempo que hice en la pole. También está la silueta del trofeo de la victoria, que es Sudamérica. Y la moto con la que lo conseguí.

-Ahí, en el bíceps, tiene que ser doloroso, ¿no?

-Un poco, un poco. Más que la frase que llevo en el muslo derecho.

Ampliar

-¿Cuántas veces ha visto en casa la carrera de su primera victoria en GP?

-Unas cuantas veces, como tres o cuatro.

-¿Y qué siente?

-Me pongo muy nervioso. Al final de carrera son unas grandes emociones. Fue brutal. Verlo es como si estuviera allí y lo vivo igual. Me pongo súper contento y orgulloso. También he visto la entrevista que le hiciste a mi padre, que es un crack, y a Josete, mi técnico, con el que conecté desde el primer momento. Nos pusimos todos a llorar porque fue una gran emoción.

-¿Ha analizado que hay que hacer para que se repita ese resultado más veces?

-El trabajo lo tenemos claro. Sabíamos de lo que éramos capaces. Lo demostramos en los test de Jerez, pero luego en Qatar fue muy complicado con la lesión que llevaba. El potencial está y lo que hay que hacer es intentar no ponerme nervioso, que muchas veces es de lo que peco. Cuando no me veo entre los diez primeros, se me nubla la mente y no pienso en que estamos trabajando para la carrera. Esto con experiencia se gana. Estamos encarándolo bastante bien.

-¿Esa victoria compensa todo el dolor físico de las lesiones y mental por tantas dificultades?

-Nadie se imagina el trabajo que hay detrás para conseguir lo que hice, y lo difícil que es. La victoria lo compensa, porque hace que no me sepa mal. Esto es lo que me gusta, lo que me apasiona y por lo que estoy todos los días. No es que me compense sino que es parte de ello.

-¿Se puede pelear por el Mundial o es mucho decir eso?

-No, no, no. No es mi objetivo. Seguro que me gustaría, pero quién sabe.

-¿Alguna felicitación más especial?

-Me ha felicitado mucha gente. La verdad es que ha sido un triunfo bastante mediático. Estoy muy contento. Uno de los que me felicitó fue Márquez (se le ilumina la cara), pero las que más llegan son las de la gente más cercana, las que más aprecio.

-¿Le miran de manera diferente al llegar al paddock?

-No me he fijado, pero sí que me siento más seguro, que no más sobrado. Es porque sabía que tenía el potencial, que lo podía hacer y al final lo he hecho. Estoy feliz y tranquilo.